Avalada y ratificada por los premios Ciudad de Salamanca y el de la Crítica de Asturias, La casa en ruinas es la última novela de Manuel García Rubio (Montevideo, 1956) . Desde las primeras líneas su protagonista, Ricardo Tremp, es retratado con un personaje siniestro y enigmático, muy inquietante. Resaltará como un resorte el pasado resguardado en el cajón carcomido de los olvidos, lo que será uno de los ejes primordiales de la obra. El recuerdo acabará por convertirse, a lo largo de la obra, en una arma tremendamente lesiva.
El ego de Tremp pasa por su ambiciones profesionales anhelando toda la vanidad del que quiere sentirse triunfador, además de su atracción por los encantos sonrosados de la noche de Madrid con su inherente contenido nebuloso de brillantina y purpurina.
En los encontronazos del tiempo está su relación con Saucedal, su pueblo, al que no planeaba volver, y al que regresará involuntariamente, tras muchos años ausente después de recibir una llamada anunciado el estado precario de su casa. Allí sentirá el embeleso agrio de encontrar viejas amistades, descompuestas en el deterioro de los años. También el resentimiento familiar de las viejas heridas que restañan como las relaciones amorosas truncadas mientras el ayer zumba constantemente chirriando el corazón.
La memoria se irá perdiendo en el dolor mientras los días pretéritos se irán abriendo página a página como un desvalido cofre del dolor.
Tremp intentará recuperar a Mela, un amor perdido de juventud, sin asumir la debilitada figura del olvido; la prosa de García Rubio asiente: "el infierno era el pasado". Esa relación marcará el signo de las horas mientras dudan los hilos telefónicos.
La casa en ruinas es una novela bien trabada sobre una biografía imperfecta, imprecisa, resignada, sin el atisbo picante de la emoción. En cada capítulo subyace la urgencia apremiante de recuperar una vida que chirría igual que un viejo edificio.
A medida que avanza el libro sumiendo al lector en el letargo emocional de Ricardo Tremp, los sueños se desmoronarán en cadena; los negocios se truncarán en la niebla del limbo y el amor será el deseo de una rabiosa obsesión. Ante este desplome del calendario se comprobará que "del infierno es imposible regresar". La utopía vital y literaria es recuperar una porción de vida deshecha mientras resuenan en el desván los ecos del pasado.
