Las vacaciones escolares facilitan que los entrenamientos del Sporting en la Escuela de Fútbol "Ángel Viejo Feliú" de Mareo estén rodeados de un entusiasmo que ha crecido con el empate del domingo ante el Real Madrid y que se acentúa por la calidad técnica que muestra en cada una de sus intervenciones el joven Halilovic, cedido por el Barcelona y fichado según las normas de la Liga de Fútbol Profesional, la única patronal que perjudica a sus afiliados. Las buenas gentes rojiblancas, según cuentan viajeros llegado a la ciudad procedentes de la citada escuela, están deseando que el gran timonel le haga un hueco al croata. La primera Mareona de la temporada se dará cita pasado mañana en Anoeta y, formada por varios centenares de seguidores rojiblancos, espera confiada presenciar la presentación del chaval, quizá en la segunda parte del partido ante la Real Sociedad. Por cierto, si pregunto, ¿molesto?: ¿debutará ante el Sporting el centrocampista Illarramendi, que ha regresado a su club de procedencia después de dos decepcionantes años en el Real Madrid, valorado en menos de la mitad del precio que el club blanco pagó por él?
Tiene morbo el regreso del jugador a su casa, un jugador puesto como el ejemplo más clamoroso de quien no puede con la presión de jugar en el Real Madrid, club que está aligerando nómina, ya que ha enviado a Coentrão al Mónaco, el Monaco, sin acento, que decía el llorado Pierre Sinibaldi. El Mónaco, eliminado por el Valencia de la previa de la Liga de Campeones. En el Valencia tuvo una actuación estelar un tal Javi Fuego, malvendido por un Sporting que tenía que traer a los amigos de la peña. Malvendido y no cobrado en una operación que produce sonrojo. Hay seguidores del Sporting a quienes se les caen las lágrimas cuando ven al fenomenal centrocampista de Pola de Siero con la camiseta de otro equipo, ahora un gran Valencia. Asunto sin remedio, damas y caballeros, señoras y señores diputados.
Aunque uno ya no sabe cuál es el verdadero calendario de Primera División, parece claro que después del viaje a San Sebastián la Liga se para para que la selección de Del Bosque asegure de una vez su presencia en el Europeo. Ese parón añade interés al partido de pasado mañana, pues un buen resultado añadirá serenidad a los quehaceres rojiblancos e incrementará el entusiasmo que rodea a los rojiblancos, que no se han bajado del carro de los invictos, aunque su último rival haya sido un Real Madrid que, diga lo que diga su entrenador, está sumido en un mar de dudas. Demasiadas dudas.
