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Fondo Norte

Un partido con más miga de lo que parece

Comprobar el peso del Sporting en su primer viaje añade interés a la cita de San Sebastián

En el día en el que un tal Usain Bolt ganaba su décima medalla en un Mundial de atletismo llegando casi de paseo a la meta de la final de 200 lisos, en ese mismo día un tal Chaves volvía a ganar una etapa en la Vuelta a España, como Messi ganaba de nuevo el título de mejor jugador de Europa por delante de Cristiano Ronaldo, el Sporting avanzaba en su preparación del encuentro de mañana en San Sebastián frente a la Real Sociedad, que viste de azul y blanco por patrocinio real, según disparatada tesis de un político catalán. Un partido, el de mañana, que tiene más miga de lo que pueda parecer, un partido de la segunda jornada de una Liga que va a durar meses y meses, hasta casi el verano que viene, cuando estamos todavía en verano. Ya es durar.

El Sporting avanza en la preparación porque hoy Abelardo y los suyos ya no comen en casa, sino en el trayecto hacia la capital donostiarra, cuando aún no se han apagado los ecos del feliz empate del pasado domingo ante un Real Madrid sumido en el pozo de las dudas que comienzan en las deficiencias que ustedes y yo conocemos de sobra. El Sporting se preparaba ayer poco antes de que se celebrara el sorteo de la Liga de Campeones, que fue una fiesta azulgrana en la que sólo faltó, por citar a alguien, Johan Cruyff, el autor de la gran época azulgrana. La UEFA homenajeó al club azulgrana por su quinto título de la máxima competición europea, en la que, dicho sea de paso, ha triunfado el exportero rojiblanco Juan Pablo, autor de un paradón crucial para su actual equipo, que no es otro que el Maccabi.

El sorteo europeo puede parecer aceptable para los cinco equipos españoles, pero siempre se sabe que está lleno de trampas aunque sea un sorteo de primera fase. Un error se puede subsanar, pero dos ya no. Claro que en las siguientes eliminatorias europeas ya no cabe margen de error. Las mayores dificultades parecen reservadas al Sevilla. Sin embargo, su entrenador, en gesto de grandeza que le honra, ha dicho que es el grupo más difícil, pero a la vez el más apasionante. Unai Emery no se arruga.

Como no se va arrugar, damas y caballeros, señoras y señores diputados, el Sporting de Anoeta. Los viajeros llegados a la ciudad procedentes de Mareo siguen hablando maravillas de Halilovic, el croata de seda. Llegado a este punto y a estos momentos, es de obligado cumplimiento mantener las buenas costumbres; por eso, si pregunto, ¿molesto?: ¿va a decidir el gran timonel darle la titularidad mañana o va a esperar al desarrollo del partido para darle salida? Eso, dando por supuesto que sea convocado en la lista de viajeros porque no se olvide que el futbolista llegó a Gijón tras un reciente parón por problemas físicos. Los ojos del mundo rojiblanco están puestos en el chaval porque lo que hace con el balón lo convierte en un futbolista distinto.

Como todo llega en la vida, el final del llamado mercado de verano, en el que algunos se sienten como peces en el agua, llega a las veinticuatro horas del lunes. O sea, no queda nada para saber si el Sporting puede rematar la faena con un cuarto fichaje o si tiene que quedarse con el espléndido plantel que madura jornada a jornada como va siendo patente.

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