Esta semana en Madrid, concretamente en los salones del Centro Asturiano, se presentará, ante muchos invitados, un libro que recuerda los años gloriosos del equipo ciclista asturiano Clas, como decían algunos: "la leche del ciclismo". Y digo esto, porque estamos viviendo en estos momentos el final grandioso -sobre todo el del sábado 12 de septiembre en la mítica etapa de la sierra de Madrid- de la Vuelta Ciclista a España.
Aún recuerdo como José Manuel Fuente, "El Tarangu", celebró en la Castellana madrileña el haber conseguido el maillot del primer neoprofesional de la Vuelta de 1988. Maillot que Clas mantendrá en su museo de grandes éxitos deportivos, logrado a base de dar pedales y de luchar contra los más grandes. El Tarangu no podía ganar la Vuelta, pero podía ser noticia y hacer cantera. Lo hizo aquella vez con Carlos Muñiz y por eso Clas creció con Cajastur y Mapei y se hizo muy grande con Tony Rominger
Una vez finalizada la 80 Vuelta Ciclista a España, todos hablan de nuevo rey, el joven italiano Fabio Aru, nacido en San Gabino Monreale hace 25 años y también del segundo, Joaquín "Purito" Rodríguez, natural de Barcelona, pero de 38 años, o de su gran rival, Alejandro Valverde, de Murcia y de 35 años. Se habla y se escribe de una gran Vuelta, de una edición cargada de novedades y de una lucha constante.
Lo malo es que hay un pero muy a tener en cuenta. La Vuelta de la mano de Javier Guillén no para de innovar, de mejorar o de soñar con lo mejor. Pero lo que no pueden hacer en la Vuelta es hablar de juventud española. Ahora no hay un Clas, no hay un Manolo Sáiz con la Once, no hay un Echavarri que trabaje en Reynolds, ni un Moreno con sus Huesitos, ni un Mínguez, ni un Maximino Pérez, ni un Carrasco, ni un González Linares, ni un Domingo Perurena, ni un? No hay juventud.
Los números de la Vuelta Ciclista a España 2015 son tremendos. Nos dicen que Purito tiene 36 años, Valverde 35, Mikel Nieve 31, Dani Moreno 35, David Arroyo 35, Haimar Zubeldía 38, Dani Navarro 32, Alberto Losada 33, José Joaquín Rojas 30, Rubén Plaza 35, Juan León Sánchez 31, Javi Moreno 30, Fran Ventoso 33, Markel Irizar 35, Imanol Erviti 31, Vicente Reynés 34 y Ángel Vicioso 38.
De 158 corredores que finalizaron la Vuelta 2015, sólo 23 son españoles. El orden final de los españoles no es malo, pero parecen demasiados los que han superado ya los treinta años en el deporte más exigente del mundo. Entre los españoles en la clasificación de Vuelta 2015, con menos de treinta años, sólo están Mikel Landa (25), Carlos Verona (22), Ángel Madrazo (27), Omar Freire (25), Pello Bilbao (25) y Carlos Barbero (24). Cuatro de ellos (Madrazo, Freire, Bilbao y Barbero) del equipo invitado Caja Rural, otro banco que hace ciclismo con juventud.
Da la impresión, y eso me lo han dicho directores deportivos que saben mucho más que yo de ciclismo, que "alguien se ha olvidado de la cantera". Si no se trabaja con los juveniles y los aficionados, poco a nada se puede conseguir. Los franceses se quedaron en Bernard Hinault y Laurent Fignón. Llevan años rodando por el desierto. Ahora se preguntan por qué no gana un francés el Tour.
En estos momentos, tras una Vuelta Ciclista a España impresionante, hay que decir también que podemos ser un calco de los franceses en un futuro muy próximo. Si tenemos en cuenta que nuestro número uno mundial es Alberto Contador y que en diciembre cumplirá 33 años, podemos hacernos una idea.
Esperemos que Contador, Purito, Valverde o Rubén Plaza tengan cuerda para rato, porque si no es así vamos a tener que hablar mucho de Fabio Aru, Nairo Quintana, Esteban Chaves, Ton Domoulin, Rafal Majka o Vincenzo Nibali, en las próximas Vueltas.
Lo dicho, es buen momento para presentar un libro del Clas en Madrid el jueves y que como dicen mis amigos astur-catalanes: "Lo de los años, habrá que hacérselo mirar"
