En contra de algunas previsiones pesimistas, no hubo sorpresa desagradable con la renovación de contrato de Dani Ndi por un Sporting necesitado de todos sus futbolistas a la vista de la situación interna, la dureza de la competición y las bajas inesperadas por lesiones como la muy preocupante de Sergio Álvarez, ausente de las alineaciones por un periodo de tres meses. Dani Ndi cumplió el protocolo exigido en su día por el gran timonel, que no se anda con bromas cuando de disciplina se trata. El camerunés pidió perdón y anunció que a partir de ahora sus asuntos van a contar con intervención divina porque su agente es él mismo y Dios. Que se sepa, no ha pedido la mediación del padre Fernando Fueyo, siempre presente en las relaciones entre los humanos y el Altísimo.
Solucionado el conflicto con Dani Ndi, las dos perlas rojiblancas militan por unos días con las selecciones sub-21 de España, Jorge Meré, y Croacia, Halilovic goleador ayer contra San Marino y próximo rival de su compañero defensa. Duelo de altura. Los dos internacionales sub-21 del Sporting jalean el futuro del club, aunque ya se sabe que el croata es propiedad del Barcelona, por lo que no cabe esperar que su estancia en el Anfield del Piles vaya más allá del próximo verano. Pero Meré está atado y bien atado y en posición de salto al primer plano de los mejores defensas españoles.
En la misma posición, la de salto, está el jovencísimo Pedro Díaz que, según los más finos analistas del lugar, va a ser un pivote de lujo, ya lo es. A sus 17 años se entrena con frecuencia con la primera plantilla porque el gran timonel no quiere perder detalle de su progresión. En su día avisó de sus condiciones un tal Joaquín Alonso, que algo debe de saber de jugar en el centro del campo. Como que sigue firme en la lista de los diez jugadores españoles que más partidos de Liga han jugado en toda la historia. A esa lista no llega cualquiera, damas y caballeros, señoras y señores diputados (en funciones). Cómo verán al chaval que Santi Denia, miembro del cuerpo técnico de la Federación Española de Fútbol, estuvo ayer en Mareo siguiendo el entrenamiento rojiblanco de Pedro Díaz.
En el día en el que se movían todas esas cuestiones, y más que quedan en el tintero, en las grandes praderas rojiblancas, el Real Madrid sufre una nueva lesión muscular de alguno de los suyos. Isco, el moreno Isco, tuvo que abandonar la concentración de la selección nacional por una dolencia que, además, le convierte en gran duda para el clásico del día 21, que se ha convertido en la gran amenaza para un Real Madrid que se asoma a una crisis que anuncia final de ciclo.
La selección del señor marqués va a pasar por dos pruebas de alto riesgo, Inglaterra y Bélgica. Serán partidos amistosos, pero ante rivales de esa enjundia no hay amistosos que valgan. Los pechos sacados tras la sucesión de victorias en la fase de clasificación de la Eurocopa han de mantenerse henchidos tras los dos próximos dos partidos, el de mañana en Alicante y el del martes. Son de esos compromisos metidos a calzador por la desmantelada FIFA que conviene sacar adelante para evitar que se reabra la caja de los reproches a un equipo en posición de bajada.
