El Sporting ha conseguido el objetivo. Después de una liga tan larga y dura y partiendo con limitaciones, se consiguió hacer un bloque casi igual al del ascenso, que peleó y supo dar la cara siempre. A la última jornada el equipo llegó con posibilidades de salvación, cosa que hasta el más optimista hubiese firmado, sólo que dependiendo también de lo que pasase en el partido Betis-Getafe. Afortunadamente, todo salió bien.

El Sporting realizó un buen partido ante un Villarreal que ya lo tenía todo hecho y que el año que viene jugará la Champions. Los tantos de Jony en la primera parte y de Sergio en la segunda, fueron dos golazos que hicieron justicia a lo visto en el terreno de juego. El Villarreal no se rindió en ningún momento, pero tampoco era su guerra y Marcelino aprovechó para hacer algunos cambios y dar oportunidad a algunos jugadores menos habituales, cosa lógica.

El equipo queda también definitivamente salvado en el aspecto económico gracias a la magnífica gestión llevada desde el nuevo Consejo de Administración. Ahora toca cargar pilas y afrontar con renovadas ilusiones una nueva temporada que deseamos todos empiece a ser la de la consolidación pero siempre con objetivos realistas y sin tirar la casa por la ventana.