La sacudida del verano ya está aquí: el Girona manda para casa a Álex Menéndez, lesionado en su primer entrenamiento con la plantilla catalana. Una rotura del ligamento cruzado no se puede esconder en un reconocimiento médico, que es, por lo visto, lo que aduce el club catalán para librarse del exrojiblanco. En situación idéntica se encuentra Coke, el excapitán del Sevilla, que sufrió la misma lesión en su primer entrenamiento con un equipo alemán que además pagó por sus servicios un buen dinero. Coke va a seguir en Alemania, donde, por lo que se ve, cumplen con sus compromisos. En Girona, no, en Girona buscan disculpas para librarse de un futbolista lesionado. Gente del nivel, como se va viendo y comprobando.

Claro que estamos ante un caso que exige la inmediata intervención no ya de la AFE, que no vale para nada salvo para que su presidente componga la figura, sino de la Liga de Fútbol Profesional. No se puede ir por la vida presumiendo de ser la mejor competición del mundo y permitir que se produzcan escándalos como el que está viviendo Álex Menéndez. El Sporting ha de dar un paso al frente y ofrecer su estupendo cuadro médico y sus instalaciones a Álex Menéndez para que complete su recuperación mientras procede judicialmente contra el club catalán, que ha echado un borrón no ya en su historia, sino en la historia del fútbol español. Álex Menéndez se merece la solidaridad del fútbol asturiano.

En días como el de ayer hay poco sitio para las bromas, pero la vida sigue. Real Madrid y Sevilla disputaron la Supercopa de Europa, en cuyo partido pasó lo que tenía que pasar. Para llegar al partido nada mejor que hacerlo con el descubrimiento de un nuevo filósofo que ojalá dure mucho entre nosotros: Jorge Sampaoli, entrenador del Sevilla. Ha dejado perlas como las siguientes: "Ganar de cualquier forma nos generaría confusión en el tiempo". O esta otra: "Quiero un estilo que genere rebeldía, un grupo que defienda una idea más que un resultado". La confusión en el tiempo es un nuevo estado de un equipo que hasta ahora anduvo siempre muy claro. La doctrina no hará falta decir de dónde procede. Monchi, vas a tener que estar muy alerta sin que se produzca confusión en el tiempo.

Claro que, damas y caballeros, señoras y señores diputados, quien menos que nadie ha de tener confusión en el tiempo es el gran timonel rojiblanco, que espera un pivote de gran tamaño y un delantero al que habrán de hacer hueco algunos descartes que se resisten a buscar nuevos horizontes, que ojalá fueran horizontes de grandeza. El Sporting, como todos, tiene hasta el último día de este mes para cerrar la plantilla, aunque está ante semana y media del debut en la nueva Liga, que se abre frente al Athletic Bilbao, prueba de alto nivel. Antes, el último ensayo ante el Deportivo de La Coruña. Los rojiblancos ya están metidos en harina. Y metidos en las buenas costumbres, si pregunto, ¿molesto?: ¿cómo ven a la actual plantilla los máximos responsables técnicos del club rojiblanco? ¿Coinciden o no en sus valoraciones con Esuperio?