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Fondo Norte

Ya llegan los mensajes contradictorios

No se sabe si el comentario de Abelardo a Eusebio es una confesión o un intento de despiste

Solventado por el Real Madrid el partido de anoche en Lisboa ante, casualidades de la vida, el Sporting, ahora de Portugal, antes de la capital lusa, a los blancos se les aparece en el horizonte más cercano otro Sporting, el rojiblanco, el de Gijón y de más de media Asturias, según desvelan solventes encuestas. Un Sporting en fase de capa caída al que se le empiezan a aparecer los mensajes contradictorios o confusos, vayan ustedes a saber.

El primero, desvelado por una cámara cercana al saludo entre entrenadores, Abelardo y Eusebio, en la banda del Anfield del Piles en la última jornada, descubre al técnico rojiblanco que le anuncia al colega una cercana despedida. "Mucho más ya no voy a sufrir", dijo, más o menos, el gran timonel, devenido en pequeño timonel según algún malvado escondido entre las masas madrileñas. El vídeo fue lanzado a la fama ayer martes, porque ayer fue martes, aunque esto siga sin ser Bélgica. Tal parece que Abelardo se despide o quizá quiera despistar al entrenador rival antes de un partido que se antojaba clave para los intereses rojiblancos.

Las idas y venidas de la más variopinta rumorología rojiblanca aparecen en cada esquina. Las de todo gusto y condición porque la realidad es la que es, y no valen ni parches ni disculpas. Lo ha entendido a la perfección el gran Nacho Cases, que reclama mejor juego: "Hay que tener más el balón, juntar más las líneas, ser más agresivos". El abecé del fútbol, damas y caballeros, señoras y señores diputados. Es bueno que uno de los líderes, al menos en el campo, tenga capacidad de autocrítica y ofrezca claridad en las necesidades a cubrir por un equipo que empezó la Liga exultante y que se ha venido quedando hasta llenar de preocupación al mundo rojiblanco.

El calendario va ofreciendo oportunidades de revertir la situación. El calendario marca que el próximo partido se juegue en el Bernabéu a primera hora de la tarde del sábado que viene. No es el mejor sitio para sumar puntos; no es el mejor en el sentido de la calidad del rival, aunque para una gran parte de los rojiblancos sea el sitio ideal para empatar o ganar dada la rivalidad existente con los blancos. El Sporting, tal como quedamos aquí hace días, ha de sumar diez puntos antes de Navidad. Está mal autocitarse, pero en este caso parece inevitable recordar un sano objetivo a alcanzar por ese equipo en el que dice confiar el ya citado Nacho Cases.

Los mensajes contradictorios se mezclan, por desgracia, con los crueles: "Es increíble que un barrio de Madrid fiche mejor que una ciudad como Gijón", sentencia un veterano seguidor del Sporting tras haber contemplado la victoria del Leganés sobre el Osasuna de Joaquín Caparrós, próximo visitante de El Molinón. Es una valoración llena de crueldad que trasladamos con la esperanza de que el cuerpo técnico sea capaz de afinar el lápiz en el mercado de invierno. Falta va a hacer.

Los tiempos exigen mantener las buenas costumbres; por eso, si pregunto, ¿molesto?: ¿qué explicación va dando por ahí Esuperio sobre la actual crisis rojiblanca? Próxima parada, Capuchinos.

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