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Pablo González

Piqué no está para bromas

El central azulgrana sorprende al asumir los cánticos contra él en la celebración merengue de Cibeles

Cuando el forofismo -el ilustrado y el no tanto- de ambos extremos del puente aéreo Madrid-Barcelona esperaba algún gesto de Piqué en respuesta a los cánticos vertidos contra él ("¡Piqué, cabrón saluda al campeón!") por jugadores como Carvajal e Isco durante la celebración del título de Liga de los blancos en Cibeles, va el central azulgrana y tira de cordura para decir que no pasa nada, que algo así es lógico en mitad de una fiesta y que más que un insulto es una frase hecha. Parece que el blaugrana asume con deportividad que para dar -su historial está jalonado de puyas como la de Kevin Roldán en la fiesta del triplete de 2015 o la de los valores del palco del Bernabeu- también hay que saber recibir. Aunque otra explicación es que Piqué realmente no esté para bromas después de que su equipo se haya visto obligado esta temporada a optar únicamente al premio de consolación que supondría para los del Camp Nou levantar la Copa del Rey. Otra posibilidad es que esté meditando su respuesta a la espera de lo que suceda en la final de Cardiff, para luego dejar alguna de sus perlas en las redes sociales en las que tanto se prodiga, al igual que otros compañeros. Tiempos nuevos, tiempos salvajes estos de los tuits y los muros de Facebook. Pero lo mejor para evitar espectáculos tan poco edificantes sería que Piqué se olvidara del tema y mantuviese la calma ahora que quiere crear "un medio de comunicación veraz" para futbolistas. Cosas del puente aéreo.

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