En plena ofensiva contra el Estado opresor, llega un fiscal y rompe el mensaje que se lanzaba desde el mundo azulgrana para defender a Messi y a Neymar. El fiscal procede contra Cristiano Ronaldo, portugués de nacencia y nacionalidad, pero símbolo del centralismo más arraigado, por presunto fraude millonario a la Agencia Tributaria. Aquellos lamentos de Piqué, siempre Piqué, porque los tribunales no actuaban igual con los jugadores del Barcelona que con los de otros clubes, siempre el Real Madrid, se vienen abajo. La Fiscalía no se anda con bromas ni con unos ni con otros, que tienen que pasar por la ventanilla, por la misma por la que pasamos el resto de españoles, aunque no juguemos al fútbol con la excelencia de los acusados.
Mientras, en territorio rojiblanco, tiempo de espera a que Paco Herrera y el club cierren el acuerdo que están propiciando el castellano leal, su hermano y el resto de miembros de un cuerpo técnico que tiene ante sí una apasionante tarea. El primer capítulo de esa tarea ha de ser el ascenso del filial, que se le verá en la eliminatoria decisiva contra el Beasain, el último cuarto que quedaba en las eliminatorias de ascenso a Segunda B, categoría ruinosa salvo para los filiales y la más adecuada a las necesidades rojiblancas porque los jóvenes se van a foguear sólo un escalón por debajo del primer equipo, que será habitante de Segunda en el próximo ejercicio.
Los tiempos cambian, vaya si cambian, y Paco Herrera, que llegó muy joven al Sporting en compañía del lateral González, jugaba la pelota a gran velocidad, pero ahora en el asunto contractual juega más lento, que es lo normal en estos casos. Herrera ya pasa de los 60, por lo que va a convertirse, sin duda, en uno de los más veteranos en llegar al banquillo de un Sporting ascensor, es cierto, en feliz definición de don Miguel Fanjul, testigo de casi toda la vida del club y profundo conocedor de sus secretos, que son muchos y muy variados.
Todo parece estar pendiente de Paco Herrera, a quien el club también le mete prisa con habilidad, filtrando que hay un técnico de gran prestigio a la espera. No será mañana, distinguido público, cuando sea presentado el tantas veces nombrado Paco Herrera. Ayer fue martes, aunque esto siga sin ser Bélgica, y mañana será jueves, un día tan bueno como otro cualquiera para presentar entrenador o jugadores. A ver qué pasa.
Y si pregunto, ¿molesto? ¿Sabe Esuperio cuántos jugadores forman la lista de bajas que han elaborado los Torrecilla para dejar hueco a las imprescindibles llegadas de nuevos jugadores? Próxima parada, Capuchinos.
