Mientras debatimos en Gijón si la estación intermodal debe ir más o menos soterrada, el Ministerio de Fomento ha dado su solución desde hace un tiempo: Ni más ni menos soterrada, simplemente quedará en el olvido aunque Gijón al Norte no deja de hacer "dibujinos" para entretenernos, "Pa mientras tanto" como le gusta decir a la concejala Lucía García.
Hace años, entidades vecinales, políticas y sociales, ya denunciamos (ver hemerotecas) que era inviable un proyecto supeditado en un 90% a la obtención de plusvalías de los terrenos liberados, así que imagínense ahora que ya no hay un solo euro de las administraciones para todo el resto. Denunciamos también que el proyecto era excluyente y especulativo, con torres "islas" que no propiciaban la cohesión e integración social con su entorno.
Llevamos cuarenta años cerrando y abriendo estaciones de tren en Gijón para ahora tener una estación provisional para 15 o 20 años más, sin centralidad y sin intermodal. Estamos, parafraseando la obra de F. Fernán Gómez, en un viaje a ninguna parte y esperando un tren que algunos ya dudamos en verlo llegar.
Partiendo del disparate de dos estaciones a 500 metros una de otra, Jovellanos y Humedal, hemos llegado al disparate actual: Del "faraónico" túnel de Cascos hasta la realidad de 2014. Cuatro proyectos con sus correspondientes cambios. Para rematar nuestro aislamiento como territorio, lo que habíamos ganado con el "Alvia" a Madrid lo perdemos en León con el famoso "fondo de saco", ahora en la picota tras las últimas movilizaciones ciudadanas. Otra vez a las catacumbas ferroviarias.
Desde 2011 vamos a peor: El Ministerio de Fomento y su titular Ana Pastor, la cual más que "pastorearnos" nos torea, comunicó que no habría nada de inversión en 2012 y en 2013 le da otra vuelta más al proyecto: Ni un EURO del estado, ni siquiera los ya comprometidos.
Nos encontramos ahora con una estación provisional que durará más que las suprimidas, con un Plan de Vías que se terminará allá por el 2025, con más de 100.000 metros cuadrados de terreno convertidos en erial abandonado, con el paso elevado de Carlos Marx dificultando las comunicaciones y sin sentido pues las vías terminan metros antes, con un edifico "vacío" en el Humedal desde hace 2 años, con una autopista cortada por la estación provisional y un barrio, El Polígono, tomado por el tráfico, con una estación de autobuses del ALSA en medio de la ciudad generando contaminación, problemas de movilidad y constreñimiento urbano y con un túnel kilométrico sin uso alguno pero con un costosísimo mantenimiento.
Con todo esto, tres años después de no hacer nada, fueron nuestros munícipes, consejeros de Gijón al Norte y diputados, a Fomento y volvieron de Madrid sin nada en las manos y tan contentos: Con el beneplácito de los otrora cabreados miembros del PP, con la inoperancia de FORO durante casi 3 años de gobierno municipal y con el silencio y la inacción de los otros. Aún no se ha oído al gobierno regional algo serio sobre el tema.
En el Ayuntamiento, tras 3 años de inacción, la concejalía de urbanismo no para de "elucubrar" en el "solarón": Ahora un paseo y un aparcamiento ¡que eufemismo para algo "aparcado" sine die! "Pa mientras tanto" lo llaman en su PGO. Gijón al Norte, por su parte y supongo que para justificar sueldos, nos cuela otro "dibujo" del entorno ¡Dibujinos non, Gracies! y nos proponen, a su vez, apostar por la estación de la Plaza de Europa como "centralidad" (sin respeto por la geometría y la geografía) sin inversión pública, sin saber qué tipo de vía utilizar y priorizándola sobre la Intermodal de Moreda lo cual supondrá tener una estación provisional para largo recorrido en Moreda, otra, al lado, subterránea para cercanías y enlace con el "túnel": Tres estaciones en 800 metros lineales. ¡Y dale Perico al torno! ¿Se merece Gijón esto?
Hace falta un plan para que no se pare el Plan de Vías. Toca ponerse las pilas a todos, conseguir un consenso ciudadano amplio que aglutine a todos los gijoneses, partidos y vecinos, para decirle a las administraciones públicas que ya está bien de tomarnos el pelo. El proyecto no depende de un dibujo de parcelas o diseños de construcción si no de cosas más serias: que se termine la Variante y nos digan para qué va a servir y como llegará el tren a Gijón (como AVE "fénix" o como simple gaviota) ya que la Estación Intermodal depende mucho de eso y por supuesto de financiación pública de verdad. No se puede decir que no hay dinero del Estado para Gijón cuando al proyecto de Vigo se le aportan 72 millones de euros de dinero público. No se pude aducir esto mientras se rescatan autopistas privadas con miles de millones procedentes de fondos públicos. No se puede oír todo esto y volver de Madrid callados e impasibles.
Toca al Ayuntamiento capitanear esta demanda ciudadana, encauzar el proceso, lograr el consenso. Intervenir diseñando la ciudad del futuro, mediante el PGO, de manera que el Plan de Vías esté integrado en el mismo y no como una "isla" en la ciudad y trabajar en un plan de movilidad que realice las intervenciones pertinentes para que esa intermodalidad de desplazamientos (la verdadera centralidad) sea una realidad. Apostar por el transporte público y la intermodalidad.
Mientras se escuchan voces e iniciativas ciudadanas y políticas que demandan una solución a todo esto, nuestros munícipes parece que no se enteran y siguen con su viejo discurso de "y tú más".
¡Señores, manos a la obra, que más que Gijón al Norte, parecemos, lo digo con todo respeto, el sur del Magreb!
Al final, si no lo hacen ustedes, lo tendrá que hacer la ciudadanía en la calle y en las urnas.
