Allá por el año 75, el Sporting se hizo con los servicios del entonces mejor extremo del mundo. De aquella existía el derecho de retención, que favorecía a los clubes modestos y así fue como en El Molinón disfrutamos de ese jugador unos cuantos y gloriosos años. De entonces acá, salvo un año a Luis Enrique y un par de ellos a David Villa, estamos caninos de ídolos de enjundia. Ver a Ferrero en sus duelos con Carrete o San José era una auténtica delicia y en la retina quedó grabado a fuego el siete que le hizo a Migueli con gol por la escuadra o el tanto de oro en el Tartiere que nos llevó a disfrutar de los mejores años de nuestra historia balompédica.
Dicho esto, esta temporada nos ha llegado, como caído del cielo, un jugadorazo que por sí solo justifica el abono y es para engolosinarse. Avisados quedan de que merece la pena acudir a nuestro centenario estadio a la vera del Piles para contemplar a un diminuto croata, de 19 añinos, que con el balón cosido a su bota izquierda todo lo hace con sentido. Disfrutemos pues en este curso de ese extraterrestre, como lo fue Enzo Ferrero, llamado Halilovic. Pasen y vean.
P.D. Al margen del fútbol, hace unos pocos años, Juanrra Pérez Las Clotas, en la terraza del Maika de la Plaza" del 6 de Agosto, en la que gustaba de tomar el aperitivo, me dijo muy solemne: "Francisco Prendes Quirós es uno de los bastiones del linaje de Gijón". Desde el pasado septiembre y hasta hoy, en su diaria columna "Ixuxú" nuestro común y republicano amigo le dio la razón al maestro de periodistas.
