Los chavistas han dejado Venezuela este 2015 con el PIB en -9%, la inflación superior al 200% y un 60% de índice de desabastecimiento. ¿Cómo es ello posible, siendo de izquierdas y dicen sus políticas en favor de las clases populares? Recuerdo un vídeo que ha circulado mucho por las redes sociales, en el cual Hugo Chávez preguntaba de quién es ese edificio, y cuando le decían de un rico contestaba: "¡Exprópiese!", o de quién es ese comercio, de un señor que tiene dos comercios, entonces el líder carismático sentenciaba: "¡Exprópiese!" como que estaba haciendo algo grande e histórico, eso sí, sin procedimiento legal alguno ni derecho a defensa del interesado, ni explicación de por qué son tan necesarias y urgentes unas medidas tan drásticas. Con ello transmitía un doble mensaje, primero que los de Hugo Chávez ordenan y mandan a capricho, y segundo que su afán es castigar a "los ricos". Claro que a poco que lo analicemos nos damos cuenta ello a medio plazo será contraproducente. Si a los comerciantes o empresarios que tienen beneficios les castigamos, ¿no estamos favoreciendo la falta de iniciativa y el estancamiento? ¿Acaso que los comercios y empresas prosperen es negativo para la economía y el empleo nacional? Pretender imponer por la fuerza la igualdad de resultados, en la economía o en la enseñanza, no es justo, sino absurdo. El mercado no es un señor perverso obsesionado con maltratar a todos, justo al revés: es el equilibrio dinámico de la oferta y la demanda. Cuando se tergiversa con precios políticos llegan los desajustes, desabastecimientos y colas.
Frente al fracaso del populismo izquierdista en Venezuela asistimos a la tendencia contraria en tijera en nuestro vecino del norte. En efecto el otro caso reciente y creciente en candelero es el populismo derechista en Francia. El Frente Nacional intervencionista en lo económico y euroescéptico en lo político ha seguido subiendo en la primera vuelta, tras los atentados islamistas de París, si bien luego derrotado en la segunda vuelta por la alianza de hecho del centro-derecha y del centro-izquierda que les deja sin gobernar ni una de las 13 regiones, aun con un 30% de los votos. Chovinista es concepto de origen francés, para definir a quien valora exageradamente todo lo nacional y desprecia lo extranjero, bastante pintoresco en la era de las telecomunicaciones y la economía globalizada. En vísperas de la Navidad se ha conocido estos días que antropólogos británicos dirigidos por Richard Neave, científico de la Universidad de Manchester, aseguran que Jesús de Nazaret era más negro que blanco. Que más da que tuviera la nariz más o menos ancha si al cabo nuestra nobleza son nuestras obras y nuestros resultados. En un mundo masivo y plural cómo puede sostenerse que cada uno es mejor en general a los demás o que hay que incautarse el mérito ajeno. En cierto sentido Jovellanos en el XVIII ha sido a Gijón como Ortega a España en el XX, planteando ambos un reformismo modernizador. Ya decía Ortega en la primera mitad del siglo XX que España invertebrada y la rebelión de las masas eran el problema y la Europa libre y próspera, la solución. La segunda y devastadora Guerra Mundial del 39 al 45, y el arranque del "Mercado Común" europeo por el Tratado de Roma de 1957 vinieron a darle la razón.
Este lunes 14 hemos visto el debate a dos antes de las elecciones generales del próximo domingo 20 de diciembre. Probablemente será recordado como el debate en que Sánchez del PSOE llamó indecente a Rajoy del PP, y éste a aquél mezquino. Quien siembra vientos, recoge tempestades. Lo curioso, aunque la noche del domingo todos traten probablemente de presentar que de alguna manera han ganado, es que con un reparto de diputados bastante dividido entre cuatro partidos nacionales, en realidad no sabremos quién ha ganado hasta que comprobemos quién y cómo puede gobernar, pues las leyes y presupuestos no puede aprobarlos en solitario una minoría si la gran mayoría de los restantes diputados están en contra, aunque sea la minoría más votada. Son las ventajas e inconvenientes del sistema electoral proporcional. Más representativo de las opciones de los electores, pero con una cámara en exceso fragmentada puede arrastrar a la inestabilidad del gobierno. En cualquier caso, pues cuando las barbas de tu vecino veas pelar, pon las tuyas a remojar, sugiero antes de votar unos minutos sobre esta reflexión: en vez de empeñarse que los ricos sean pobres, mejor es impulsar que los pobres sean ricos. No me gustan las armas ni el Oeste del XIX, tampoco por decir que somos vegetarianos nos dejará de atacar el tigre, y quiero una sanidad universal, pero antes que chavismo o chovinismo: ¿saben que en los USA tienen un 5% de paro, el salario medio triplica al español, eligen sus candidatos por primarias libres, y les gusta su bandera con 50 estrellas? Elijamos.
