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Caída libre

Con tanto esperpento en Cataluña y en la cabalgata de Madrid, quedan pocos reductos para la ilusión

Estamos de caída libre, cada día más abajo. Nadie se podía creer que una comunidad española hiciera algo en contra de la ley, de la ley que nos rige a todos los españoles y en contra de la Constitución que aprobamos todos los ciudadanos y seguimos a rajatabla porque para eso la creamos y aceptamos.

Pues sí, Cataluña lleva amenazándonos a todos los españoles con separarse de nuestro hermoso país y formar una patria aparte desde hace mucho tiempo pero, la verdad, pensábamos que al final reaccionarían, entre otras cosas porque no se puede hacer nada en contra de la ley y la Constitución. Pero una serie de personas se saltaron todas las consideraciones y aprobaron un Parlamento y un Presidente de una manera rocambolesca, teniendo todo en contra, ni mayoría absoluta, aceptando la ayuda de unos señores a los que tuvieron que expulsar de su partido -perdón ¿dije partido?. Porque son unos cuantos amiguetes que en otra época de nuestra historia estarían fuera de la ley-. Tuvieron que echar a un tal Mas que no quería más que ser Presidente y que fue el que más contribuyó a que su Comunidad no quisiera ser española y además amiguete y colega de un tal Pujol que se metió en el bolsillo procedente del erario público mucho más dinero del que yo me pueda imaginar. Y suma y sigue.

Las cosas como son, yo creo que nuestro Presidente tendría que haber actuado primero, dejó que las cosas fueran demasiado lejos. Yo me imagino que a base de transigir pensaba que conseguiría que las ovejas volvieran al redil. Pero son unas ovejas con algo de mulas y siguieron a lo suyo.

Yo creo que los catalanes se han hecho un flaco servicio a sí mismos, con lo peseteros que son ellos se van a quedar a dos velas. Ya se sabe que muchas empresas extranjeras que pensaban establecerse en Barcelona han paralizado las gestiones. Conozco a muchos catalanes que se han llevado sus fábricas a Valencia y a Zaragoza. Si creen que los españoles les vamos a dar algo que se olviden. Las listas que se están repartiendo por toda España, informando de las empresas que son catalanas para que no les compre nadie son interminables. Puestos a viajar y hacer turismo a un país extranjero en el que hablen otro idioma, escogeremos otro y no Cataluña porque quién más y quién menos habla inglés, francés o italiano pero catalán nadie y no estamos interesados.

Me parece que los catalanes que no eran partidarios del separatismo han hecho muy poco para combatirlo, han mirado para otro lado, callado y otorgado. Así que ahora tendrán que tragar que les mande el CUP, Podemos y el Sr. Carlos.

Rajoy, de momento salió inmediatamente en la televisión, con el apoyo del PSOE y Ciudadanos, a decir que no iba a consentir nada semejante, que todo el mundo que actúe en contra de la ley y la Constitución tendrá que rendir cuentas y estará fuera de la ley. Naturalmente el Sr. Pablito no sabe no contesta. Pero yo no sé qué va a poder hacer el Sr. Presidente ni como.

Bueno total que todo paralizado, somos el hazmerreír de toda Europa y más allá. Aquí no hay orden ni concierto. Encima estas actuaciones son un modelo a seguir por otros separatistas que de momento están callados.

Ahora con todos estos personajes gobernando, gente de poca cultura, sin educación, llenos de rencor y de odio, que confunden el tocino con la velocidad nos están haciendo papilla a las personas tranquilas que trabajamos, cuidamos a la familia, queremos conservar unas tradiciones y no nos dejan. Porque las historias de las cabalgatas de Reyes de este año son una sinrazón. La de Madrid fue lo menos parecido a una cabalgata de toda la vida, fue chabacana, vulgar, laica a tope pero es que la cabalgata no es laica, es una tradición cristiana y muy nuestra y la mayor parte de los españoles la queremos como siempre, independientemente que seamos muy religiosos o no, pero es una hermosa tradición que queremos conservar.

Hablando de Cabalgatas de Reyes, la de Gijón fue fantástica, todos los participantes estuvieron horas bajo la lluvia y no quisieron que se suspendiera, felices de ver la carita de emoción de los niños y sus padres que, a pesar del tiempo, no se la perdieron. No faltó de nada, Reyes, pajes, música, animales de los Belenes, alegría, solidaridad y amistad. Gracias a nuestra corporación por habernos permitido disfrutar de nuestra tradición.

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