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Profesor de Geografía e Historia

El bulevar de Río de Oro

San Lorenzo tiene actualmente el menor arenal del siglo

La transformación de la calle Río de Oro en un bulevar es una buena noticia para los habitantes del populoso barrio. Dentro del próximo presupuesto anual de obras municipales. El Llano es el barrio más poblado del municipio, con unos 40.000 habitantes, y de hecho su centro geográfico. Por ello cuando hablan de situar la estación del tren más al norte, cerca de Cimadevilla (casco histórico pero no centro espacial, vértice norte de la urbe con forma de rombo), como sinónimo de "más céntrica" en realidad es un contrasentido, pues siendo El llano el centro poblacional y espacial de la ciudad de Gijón, cuanto más hacia el norte esté la estación, menos céntrica estará, no solo para los habitantes del Llano, sino también y peor aún para los de Pumarín, Viesques, Montevil? Así pues lo deseable será contar con una estación en el entorno de la plaza de Europa, y dentro de ello cuanto al más sur, mejor. Yendo al detalle inmediato, el dotar de aceras más anchas a la calle, en una zona con centro de salud, centro comercial, centro municipal y dos colegios, ha de redundar en mejor servicio a los ciudadanos e impulsar un modelo de ciudad compacta y cordial. Contamos con la ventaja de poder canalizar el tráfico, tanto de coches para entrar y salir de la ciudad como de bicicletas por la paralela y muy ancha avenida del Llano. La correcta planificación de los espacios no consiste cuanto en privilegiar ni acosar a los coches, en la práctica todos somos alguna vez conductores u ocupantes, sino en el equilibrio ponderado de espacios en beneficio común para peatones, ciclistas y vehículos.

Otra calle significativa de la ciudad, en este caso del centro-oeste en Poniente, es Marqués de San Esteban, "la de los arcos". Aquí no sabemos si su necesaria reforma está encauzada o estancada. En tiempos limpiaron las fachadas, muy ennegrecidas por la polución derivada de la contaminación de carbón arrastrada por el viento. Ahora convertida en zona nocturna de la "movida" juvenil, y los jóvenes y no tan jóvenes tienen derecho a divertirse, -¿por qué no?-, pero suele presentar un aspecto de gran suciedad y deterioro. Además de una modernización y limpieza, podrían realizarse tareas preventivas. Las baldosas que suelen empelarse como suelo en las aceras tienen sus partes salientes muy pequeñas, dibujos a modo de tabletas de chocolate, en vez de ser baldosas más lisas o con "tabletas" de mayor tamaño, de más fácil limpieza. Quedan aquellas más estéticas quizás, para gustos hay colores, pero ¿son prácticas? Confieso que cuando voy a algún sitio o simplemente paseando no suelo fijarme en los dibujos de las baldosas. Más bien en por donde tengo que ir, si los semáforos están en rojo, o en la acera hay charcos, chicles o excrementos. Evidentemente la suciedad tiene a acumularse entre las ranuras de las numerosas y pequeñas superficies. En la medida de lo posible, la reordenación debe conciliar los espacios para mayores aceras, aparcamientos y circulación fluida de vehículos y segura de peatones, en áreas nocturnas concurridas. Además de poner baldosas, bancos y farolas, precisa una reforma y adecuación integral.

Hablando de ríos tenemos el caso del Piles al este de la ciudad, más bien riachuelo desde un punto de vista geográfico. Una vez llegado al sector este de la playa de san Lorenzo, la corriente fluvial sigue un breve curso submarino noroeste hasta una cota -3 metros. Si queremos mejorar la playa y que de verdad tenga suficiente arena seca y mayor atractivo turístico, no es descabellado plantear el desvío al este del cauce unas decenas de metros. En el sector oeste, área rocosa de la iglesia de san Pedro, la solución será una defensa para proteger un posible arenal creciente, como las que hay en los laterales de la playa de Poniente. Y en el sector central tenemos un área problemática (donde se ahogaron los niños de Zamora), la poza donde la batimetría pasa en marea baja de -1 a -2 metros, pequeño pero peligroso canal de resaca, pues el oleaje en la ensenada de san Lorenzo no es global sino subdividido en dos ondas con reflujo central (escaleras donde sitúan el "canal deportivo" y está prohibido el baño). Podría estudiarse la conveniencia de tapar la poza, que conllevaría mucha mayor seguridad para el baño en el área central del arenal. Lo que desde luego resulta patético sería dejar la playa como está con escasa arena seca, de 15 escaleras con el agua en pleamar subiendo hasta el muro en las 10 primeras escaleras, y dejando una superficie utilizable que en realidad no llega a 50.000 metros cuadrados. Las calles racionalizadas, mucho mejor. Y lo ecologista no es dejar la playa estropeada. Lo ecologista es arreglar un poco la playa.

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