Revueltas las aguas, revueltos los vientos; revueltas las tierras de la bella Perlora? Así se encontraban las Asturias en la primavera de 1978, gobernando el reino Adolfo Suárez, cuando el jueves 26 de abril se abrió la campaña electoral para elegir un senador por Asturias en sustitución del dimitido Wenceslao Fernández Roces que, anciano y aburrido, toma la decisión de volver a su Méjico, del que se había hecho hijo adoptivo, pues no se lograba "desadoptivar"...
Momento político muy delicado para el PCE que apenas un mes antes había sufrido una escisión interna, bandera que levantó Vicente Alvarez Areces, que a la disculpa ideológica de destrucción por Carrillo de los principios de identidad que habían mantenido al Partido Comunista en primera línea del "antifranquismo", se sumaba la frustración originada por la política jurásica impuesta por la todopoderosa dirección, que decidió colocar en Asturias las candidaturas de dos ancianos: Pasionaria en el Congreso y Wenceslao Roces en el Senado. Años más tarde el propio Alvarez Areces, Presidente de Asturias por el PSOE, inauguraba en Colunga, el 31 de marzo de 2004, el que resultaría ser un muy visitado y exitoso "Museo Jurásico"? Desde entonces a hoy, y supongo que a mañana también, las izquierdas irredentas achacan a Alvarez Areces cuantos males, corruptelas o corrupciones se dan en esta tierra de ancianos, ampliaciones, cementos y pomares certificados?
Aquella elección parcial del 17 de mayo de 1978 tuvo similitudes externas con la segunda elección general que habrá de reproducirse, por manifiesta impotencia de los cuatro partidos, el próximo 26 de junio; similitud significativa, al menos, en el sentido de que en aquel momento dos partidos de la izquierda acaban de fusionarse, o mejor dicho, el PSOE, de Felipe González y Alfonso Guerra acaba de absorber, -deuda, cuadros, y parte de la militancia incluida- al PSP de Enrique Tierno. Y ahora ocurre algo muy similar, con parecidos o, al menos en Asturias, mayores rasguños, entre Podemos e IU, asediada (como en su día el PSP) por mil deudas y los caballitos de Troya de mal disimuladas ambiciones.
El PCE insistió en 1978 en que, tratándose de una vacante producida en la entente del Senado Democrático (Frente Unitario de Izquierdas) de junio del 77, le tocaba a él cubrir la plaza, pues él había sufrido la baja; pero el PSOE no accedió a la pretensión, -no pactada por imprevista-, máxime cuando en el recién incorporado partido minoritario contaba "sin colocar" con una personalidad asturiana del relieve intelectual y personal del diplomático Fernando Morán, que once meses antes había quedado a la puerta de ser electo para el Congreso por Madrid.
Aquella elección parcial, al votarse a un solo candidato, en lugar de abierta entre candidatos, como por la Ley Electoral es la votación para el Senado, quedó cerrada entre partidos, tal como si de elección al Congreso se tratara.
Finalmente, sería el candidato del PSOE, el exPSP Fernando Morán, que pronto sería ministro, el que resultó electo con 121.729 votos, en detrimento del camarada Horacio Fernández Inguanzo, -el buen paisano-, que quedó con sus 86.671 votos en muy honroso tercer lugar a solo 820 del segundo clasificado en la carrera electoral, el doctor Adolfo Barthe Aza, que representaba al partido del gobierno; pero muy por delante, 31.551 votos más, del célebre oftalmólogo Luis Fernández Vega, de la mejor sociedad ovetense, íntimo amigo de los señores. Fraga y Cascos, destacadísimo dirigente de la Alianza Popular astur?
Solo el candidato Horacio Inguanzo mejoró los resultados de su partido en relación a la elección al Congreso del 15/06/77. El "Paisano" pasó de los 60.000 votos que tuvo el PCE en el 77 a 86.761, mejorando sustancialmente el resultado obtenido por la desacertada lista de Pasionaria, a la que seguía el propio Horacio, Gerardo Iglesias, González Cascos, Álvarez Areces etc.? ¿Dio esta resultado razón a los "perloristas"? Electoralmente, al menos, parece que sí.
Sin embargo, la convergencia PSOE-PSP, a pesar de la relevancia del candidato, de la reiterada presencia en Asturias de los dirigentes nacionales de ambos partidos, y de una campaña intensísima, más de trescientos actos electorales celebraron las nueve candidaturas durante las tres semanas de campaña, no dio el resultado esperado.
El domingo 15 de mayo, en el Molinón, casi "abarrotado" por socialistas y simpatizantes procedentes de toda Asturias, cerró su campaña el PSOE, con las intervenciones de Tierno, González y Morán. Todo parecía sonreír al candidato socialista. Aquella misma tarde, tras el acto electoral, en el Restaurante "Las Delicias" donde pudimos recalar gracias a la "bondad" de su Valentín, tras larga peregrinación por restaurantes más económicos, pero llenos de "primeras comuniones", que hubimos de emprender terminado el mitin, por la decisión del propio Tierno de rechazar la invitación a comer en el Parador formulada por el Secretario General del PSOE, -"¡Qué lástima!, el amigo Prendes ya tiene organizada nuestra comida"-. Tras buena espera, pues sus salones también estaban llenos, Valentín nos instaló en larga mesa en el patio-jardín de sus delicias; y aquí fue donde Tierno, sin proponérselo, continuó haciendo inesperada campaña con la firma de recordatorios de primera comunión...
Comenzó un padre que "osó" acercarse de la mano de su hijo-marinero, y pedirle a Tierno que le firmara en el recordatorio que el niño empuñaba bien en alto. Tres minutos después se había formado una larga fila nutrida por marineros sin graduación, aviadores sin avión, algún caballero de Malta sin espadín, más padres, hermanos, primos y amigos endomingados. Ni una madre, ni una sola niña? A los pequeños, Tierno les firmaba en su estampita y daba una palmadita cariñosa; a los mayores, les explicaba pausadamente, que "Estamos aquí por lo de Fernando Morán que, ¿sabe usted?, se presenta a senador, y es buen amigo y persona de mucho fiar"? "Nunca había firmado en estampas, -reconocía el profesor, pícaros los ojos enfermos y abierta la sonrisa-, seguro que algún voto habremos ganado".
A pesar de todo, el resultado del comicio para la "formación" política ampliada no fue bueno: la abstención casi duplicó la de la elección del 15 de junio anterior, pasó de 27,4 al 52,28%; el PSOE+PSP, que sumados los resultados obtenidos por los dos partidos en junio, habría conseguido 223.657, quedó el martes 17 de mayo en 121.729, casi 102.000 votos menos?; UCD bajó casi 70.000; PP, 22.000 ...
Es decir que la segunda vuelta, posición casi similar a la actual, produjo doble abstención (peligro que hoy también se corre); y en los dos partidos recién unidos considerable disminución de votos, y eso que la unión socialista se había celebrado con pompa internacional solo unos días antes; actualmente, cuando en vez de "pompa" hay malestares varios que pueden terminar convirtiéndose en "bomba", el resultado puede ser cualquier cosa?, la que sin duda veremos si llegamos vivos al 27 de junio, día después de la citada electoral, y festividad de San Ladislao de Azcona...
