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La esquina

Una ciudad de llambiones

En el día del patrón de la ciudad de Gijón este periódico anuncia que a mediados de agosto el nombre símbolo del gran gremio asturiano de las confiterías abrirá un local en el centro. La firma creadora de los universalmente conocidos carbayones amplía su negocio en una ciudad de llambiones y va a competir con las prestigiosas firmas de la confitería local. No es novedad que una firma de Oviedo se instale en Gijón, y al revés, porque Asturias es pequeña y las posibilidades de negocio no son muchas. La caduca rivalidad hace tiempo que duerme el sueño de los injustos. El simbolismo de la futura apertura reside en que un comercio, una confitería en este caso, abre en Gijón, donde tantos comercios entrañables y queridos han ido cayendo por culpa de una interminable crisis. A tanta liquidación por cierre suceden, por fortuna, algunas aperturas que, como en este caso, endulzan la situación. Los llambiones gijoneses están de suerte.

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