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Cambiando calles

Creo que lo normal es ser republicano si uno piensa en el papel de las monarquías y los imperios en tiempos pasados. Aquellos reyes y emperadores todopoderosos que podían hacer y deshacer a su antojo. Todos sabemos que el poder corrompe e incluso una persona de buenas intenciones puede tomar decisiones erróneas por influjo de los que le rodean, consejeros en quienes confía pero buscan su beneficio.

No creo que la reina Isabel Iª hubiera expulsado a los judíos si no la hubieran engañado Torquemada y los suyos. No creo que supiera que en el mundo de la sanidad los judíos eran los que más sabían, los mejores médicos, por eso los españoles se quedaron sin buenos doctores por una buena temporada. Aquella manía de todos los confesores de la reina (demasiados) de convertir a todo ser humano al cristianismo, de cualquier manera, por las buenas o por las malas, causó mucho mal a la reina, a la iglesia y llevó a la creación de la Inquisición.

Enrique VIII también produjo un daño irreparable a Inglaterra y a la Iglesia por culpa sus apetencias sexuales irrefrenables. Sin que nadie se atreviera a contradecirle porque su inmenso poder se lo impedía. Podría seguir dando ejemplos ad infinitum, desde Francisco I de Francia, pasando por Carlos V y Felipe II, los zares....

Afortunadamente las monarquías absolutas han desaparecido para convertirse en constituyentes o parlamentarias en las que el rey o la reina tienen un papel moderador o árbitro en los conflictos del gobierno elegido democráticamente, el rey tiene una figura casi simbólica. Me parece que esta fórmula no está mal, teniendo en cuenta que nuestros políticos en este momento son incapaces de llegar a un acuerdo de mínimos para formar un gobierno, que están demostrando ser un lastre para el país, es bueno tener una monarquía que nos representa y devuelve a España el prestigio en el extranjero. Aducir que tenemos que pagarles como si por ello fuéramos a la ruina es absurdo, cuando estamos pagando a unos políticos que nos llevan a la ruina de verdad.

A mi familia Álvarez-Buylla republicana hasta los tuétanos no le gustaría oírme esto. Ya mi tártaratártarabuelo, el médico Plácido Álvarez-Buylla era del bando democrático progresista y pertenecía al Republicanismo Federal, a partir de él todos fueron republicanos. Mi familia González-Alegre, dueños de la Banca González-Alegre también eran republicanos y progresistas. José González-Alegre fue Gobernador Civil cuando se proclamó la República. En las dos familias no se hablaba más que de la caduca institución monárquica y que la República era la institución salvadora.

Cuando para conmemorar el aniversario de la I República el 11 de febrero se organizó un banquete en el Teatro del Fontán de Oviedo, el organizador fue José González-Alegre y asistieron Adolfo Álvarez-Buylla, sus tíos Arturo y Manuel Álvarez-Buylla, Benito Álvarez-Buylla etc, era casi una reunión familiar.

Sin embargo, yo opino que nuestra Monarquía está haciendo mucho bien al país, el Rey Felipe y la Princesa Leticia están haciendo una labor muy buena, representándonos con gran dignidad, comportándose como una pareja moderna, sin ostentación. Yo voto por ellos y por este tipo de monarquías.

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