Ramiro Fernández inauguró ayer por la tarde muestra en Gijón de utensilios de su profesión. De Ramiro se puede decir lo que dijo el cineasta Agustín Díaz Yanes de Enrique Ponce en una pasada presentación de la feria taurina de Begoña, que es el español que mejor conoce su profesión. Ramiro, ilustre allerano, inició su vida profesional en Gijón, aunque la vida lo llevó a Oviedo y lo convirtió en un ovetense jalonado de asturianía y universalidad. Ramiro supera el carácter local de su figura y lo demuestra la muestra que se ha traído a Gijón para disfrute de todos aquellos que respetamos lo que ha habido antes de ahora, incluido en el gremio de la peluquería de caballeros, oficio en el que Ramiro ha alcanzado la excelencia. Ha peinado las mejores cabezas de España y no es ninguna exageración. Ahora ha vuelto a Gijón, que fue donde empezó todo, y todo es una carrera profesional que llena de orgullo a sus contemporáneos.