La actualidad gijonesa es tantas veces una especie de bucle en el que se va de los problemas del saneamiento a la falta de arena en la playa o de los problemas del túnel del metrotrén a la parálisis del plan de vías, que ha producido un hermoso prado que va desde El Humedal hasta cerca de Oviedo. Pues ahora habrá que añadir el asunto de los Juzgados. Resulta que Gijón ha pasado de ser una ciudad para todos a una ciudad de Juzgados. Recién cerrado el edificio de Prendes Pando, se abrió el de Poniente, que pronto dejó sitio al actual, al de La Bohemia. Tres edificios sanos y robustos para sede judicial, con dos de ellos a los que no se acaba de meter mano. El Principado anuncia que unificará todas sus dependencias en Poniente, y va a ir sobrado. La sede de Prendes Pando, pendiente de solución a la polémica de la propiedad, seguirá cerrada y sin uso por los siglos de los siglos. Cuando nos ponemos sobrados, vamos sobrados.
