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Crítica de arte

Ramón Prendes ha vuelto

El artista gijonés expone una muestra de cerámicas, oléos y acrílicos datados en 2016

Ha vuelto Ramón Prendes (Gijón, 1951) a sus mares del norte, llenos de misterio y sugerencias. Y digo el norte porque tanto puede ser el Cantábrico de Gijón y alrededores como el Atlántico de las rías gallegas. Ha trabajado durante el año 2016 para colgar esta exposición en Cornión. Y ahora se encuentra descansando frente al mar en la casa familiar de Villagarcía de Arosa, entre Padrón y Cambados. Vive el pintor frente a la gasolinera de Viesques, en casa edificada por el arquitecto Manuel del Busto en 1920 y rodeada de espléndido jardín con altos árboles que filtran luces distintas a cada hora del día. En esta casa vivió su padre, Ramón Prendes Moré, director durante dos décadas del Sanatorio Begoña, fallecido a los 93 años en octubre de 2014.

Todas las piezas de la exposición llevan fecha de 2016. Y son 15 cuadros al óleo sobre lienzo, 12 más pequeños al acrílico sobre papel y 11 cerámicas, dos de ellas tituladas "lingam" y el resto sin título. Digamos que el lienzo de los óleos ofrece al tacto una textura como de hule, debido a que Ramón Prendes nunca utiliza pinceles sino solamente espátulas, con las que aplica el color a base de infinitos toques de meditadora paciencia. En cuanto a los "lingam" representan el falo o más bien la energía masculina del dios Shiva, asociado al "ioni", vulva o energía femenina. Así se utilizan en los templos de la India y el Nepal. Las cerámicas han sido hechas en el taller del famoso ceramista Manuel Cimadevilla (Oviedo, 1956) con residencia actual y taller en Llanera. Siempre bajo el supuesto de que la cerámica puede y debe competir en igualdad de derechos y valores artísticos con la pintura o la escultura. Manuel Cimadevilla ha sido noticia durante los últimos años al exponer en el Museo Bellas Artes de Asturias cerámicas diseñadas por artistas asturianos de mucho renombre, como Bernardo Sanjurjo, Fernando Alba, Maite Centol, Tadanori Yamaguchi, María Jesús Rodríguez, Paco Fresno, María Vallina etc. Comisariadas por Alfonso Palacio, actual director del Museo, tales exposiciones se celebraron en los años 2007, 2011 y 2015-16, escogiendo como tema los cuencos, vasos y cajas, respectivamente. Es la primera vez que Ramón Prendes expone cerámicas junto a sus pinturas. Como la que aparece abajo en el centro, titulada "Cerámica sin título".

En el catálogo digital compuesto por la Galería Cornión para este evento, escribe Ramón Prendes: "Es costumbre de esta galería (y otras muchas) el hacer un catálogo en el que se reproducen obras precedidas de un texto. Yo: Cuando pinto, pinto y cuando escribo, escribo. Y aquí y ahora se trata de una exposición de pintura, por lo que prescindiré de las palabras, ya que tal vez, más que enriquecer, limitarían. De todos modos? para seguir, a mi manera, la costumbre, no pondré palabras sino una sola, una única palabra que es la única que creo absoluta (de momento): Soy contradictorio".

Además de criticar a los artistas que escriben sobre su propia obra en los catálogos de sus propias exposiciones, Ramón Prendes admite sus contradicciones personales. Lo que significa que cualquier día puede dar a la imprenta un diario de sus experiencias espirituales ilustrado con sus pinturas. Porque hasta ahora se ha reservado cualquier lectura temática de las mismas, que a veces titula con palabras inventadas, como la serie de acrílicos sobre papel. Comentamos alguna de ellas.

"Urgut" (en la imagen central de la página) ofrece el aspecto de una plaza de Giogio de Chirico u otro de los metafísicos italianos. Pero también suena a plaza de Argelia o Marruecos. No falta la chimenea fálica. Pero Urgut es una localidad de Uzbekistán, provincia de Samarcanda.

"El año de San Marino" (abajo, a la derecha) tiene como fondo los Picos de Europa, con los dos picos más altos de la cordillera, el Pico de los Cabrones y Torrecerredo, vistos desde la Vega de Ario, donde Ramón Prendes y su cuñado Javier del Río confirmaron su vocación de pintores. Pero las montañas tienen abajo una puerta surrealista, y un perro heredado. Un hombre asciende, una mujer se eleva como alma que reza desde una casa incendiada. ¿Por qué San Marino?... Hay alguna historia oculta.

"Shankar" es obra de refinado colorismo. Parece por su título un homenaje a Ravi Shankar (Benarés, 1920-San Diego, California, diciembre de 2012), gran difusor de la música hindú clásica y virtuoso del instrumento llamado sitar. Un "lingam" en el suelo. Pero también una mano de mujer con manzana y una serpiente. Mezcla de tradiciones religiosas en la pintura de Ramón Prendes y de músicas orientales y occidentales en Shankar.

"Pantorgas" expresa la admiración de la naturaleza y el mar misterioso de Ramón Prendes. Sombras increíbles bajo los acantilados, veleros navegando y rocas de aspecto fálico. Pantorgas son islas de la costa asturiana en Tapia de Casariego.

"Mogaro" (abajo a la izquierda) es una empresa que fabrica yates de aluminio. Magnífica composición de círculos (relojes, luces de faro) y rectángulos, que a su vez combinan colores. No faltan alusiones fálicas al mar como fuente de vida. Ramón Prendes es un pintor de excelencia en cuanto al tratamiento de los colores. Y puede decirse que no hay pintor de renombre en Gijón que no siga en este aspecto su obra de cerca.

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