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Carta al amigo ausente

Que Asturias siga siendo paraíso para los vivos

La región no puede quedarse atrás en el necesario acceso a las nuevas tecnologías ni en la transición a las energías renovables

Corría el año 1996. Presenciamos juntos el discurso de la inauguración de la Feria de Muestras de ese verano en el Pabellón de FIDMA. Claudio Fernandez Junquera era entonces el Presidente de la Cámara de Comercio de Gijón, con quien compartía a menudo grandes conversaciones sobre progreso en mi calidad de vocal de la entidad. A los dos nos sorprendió su discurso, en el que reclamaba con gran energía a los representantes de los partidos políticos que ocupaban el estrado junto a él, que era urgente y prioritario destinar inversiones a las comunicaciones, puesto que Asturias se estaba quedando a la cola con respecto al resto de las autonomías y muy distante internacionalmente en este importante factor de desarrollo.

No le hicieron caso, o al menos a tiempo, y cuanto se llevó a cabo se hizo con escasez de aplicación presupuestaria para ello, lo que ha arrastrado a la triste situación actual, en la que se observa una situación estática, colocándola en este campo al lado y no en el centro del ansiado progreso necesario, para competir en su entorno productivo, de lo que sin lugar a dudas gran parte de culpa la tiene la deficiente comunicación y adaptabilidad a las necesidades.

Un pequeño análisis de la situación en la comunicación a través de los soportes básicos nos da una evidente prueba del deterioro de esta situación: por ferrocarril, sin AVE y con una duración del viaje a Madrid en el mejor de los casos de 5,20 horas; en avión, sin vuelos competitivos en precios, dependiente además de las decisiones de una sola compañía aérea que, a su antojo, se permite el lujo de cancelar y disminuir vuelos, dejando en tierra a pasajeros con billete; por carretera, la que enlaza por antigüedad con la cordillera, tiene un costo de peaje hasta su llegada a Madrid de 51,30 euros ida y vuelta. Un caprichoso retraso en su construcción por las dos alas este-oeste ha tenido que soportar retrasos inmensurables de finalización, consecuencia de discusiones innecesarias en el trazado. Por mar inexistente comunicación continua con otras localidades internacionales, amén de la carestía de los fletes en los transportes marítimos que obligan a las empresas de uso a transportar sus productos por otras vías, incluso para ser reconducidas por mar embarcando en otras localidades nacionales hacia otros horizontes

Me conoces querido amigo y sabes que no soy pesimista con nuestro Principado de Asturias, simplemente ahora, pretendo sensibilizarle para que se apresure a buscar oportunidades que le permitan mantener en tensión su flujo productivo en el futuro, considerando que el futuro empieza con cada respiración.

Se está hablando ahora de la prioridad que marca para el futuro adaptarse a una nueva regulación energética, en la que, tanto el gobierno central, como los autonómicos tienen mucho que aportar en cuanto a normativas y adaptabilidad a las nuevas tecnologías y especialmente a fuentes de generación diferentes que disminuyen los riesgos en la salud ciudadana, cuya implantación está más acorde, tanto con las necesidades empresariales y de consumidores particulares, como por la reducción de los efectos dañinos al cambio climático, latentes en nuestro planeta.

Nuestra región autonómica no puede quedarse atrás en la evolución hacia esta imperativa decisión de adaptación a nuevas tecnologías, pues sabido es que la generación de la energía carbonífer, tiene fecha de caducidad, aunque nos resistamos por motivos nostálgicos a reconocerlo, pero la realidad es que en todos los estamentos se acepta su disminución, aunque ahora tratemos en esta comunidad de alargar en la medida posible su liquidación manteniendo una mínima cuota de aportación al mix energético, que evite su finiquito de inmediato y que todos defendemos para evitar el finiquito de las escasos pozos en funcionamiento.

Abogo por no estar inertes hacia la transformación energética que se avecina de inmediato, sin perder de vista que el tiempo pasa con prontitud y que el paso que no demos nosotros avanzando hacia el futuro, otros lo darán y volveremos a dejar la oportunidad de engancharnos a las nuevas tecnologías. Asturias es fuerte en radiación solar, y otras fuentes renovables. Es privilegiada en empresarios innovadores, tiene una mano de obra técnica superior a la media de las comunidades, con universidades y escuelas técnicas de primer orden, es referente en innovación con industrias punteras capaces de crear sin descanso adaptándose a nuevas necesidades. Por ello, no podemos permitir que se nos escape coger el tren del nuevo sistema energético tan necesario en la economía mundial, al objeto de que no se repita la consecuencia de las comunicaciones y volvamos a quedar en lugar que no se justifica en nuestra historia .

A veces pienso que esta época que vivimos, tan llena de sensaciones cambiantes, se asemeja a la época de 1492 como centro de los mayores acontecimientos históricos en el mundo, por lo que, no debemos desaprovechar las oportunidades que nos dan los cambios que se avecinan, y por lo tanto no deben cogernos desprevenidos.

Es momento de incorporarnos a la transición energética, con la misma fuerza que nos adaptamos al carbón , con gran éxito para nuestra región. Fuentes de energía renovables, tenemos en nuestra región suficientes y variadas como para conseguir situarnos a la cabeza nacional, lo que nos proporcionará bienestar y control económico y social más acorde con las nueva racionalización del consumo energético, cada día sin duda más necesario en los hogares y empresas.

Asturias debe conservar su carácter de paraíso terrenal, pero es necesario que siga siéndolo para los vivos.

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