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Profesor de Geografía e Historia

Contra el turismo

Los antisistema siguen empeñados en boicotear el progreso real

Ahora llega la polémica sobre los pisos turísticos, que están siendo regulados -¿o boicoteados?- en varias comunidades autónomas. No se entiende por qué un propietario puede alquilar su vivienda a turistas si está en la primera planta, sí; y si está en la segunda, no. El criterio tendrá que ser que tenga que pasar las mismas revisiones y pagar los mismos impuestos que un hostal o una pensión. Si el argumento es que incita a subir el precio de los alquileres, es contraproducente. Cuando aumenta la oferta, tiende a bajar el precio. Cuando desciende, tiene a subir. Para que baje el precio de los alquileres la solución es poner más viviendas en alquiler. En el caso de Gijón tenemos además la estampa de la playa de san Lorenzo sin arena seca en pleamar. Cada primavera la monserga que la playa cada vez tiene más arena seca, cuando es claro y evidente que tras la ampliación exterior del puerto del Musel cada vez tiene menos. Pues otro informe para decir que el sol es cuadrado, lo reiteran, y se creen maravillosos.

En veranos anteriores hemos visto grupos antisistema y gobiernos izquierdistas tratando de boicotear el auge del turismo. Con tasas ecoturistas, ¿va a arreglar mucho el medio ambiente esos euros de más que hacen pagar a los visitantes del norte de Europa? Prohibición de abrir hoteles nuevos en determinados barrios, ¿se imaginan que prohibieran abrir bares en barrios por el criterio subjetivos de "ya hay bastantes"? Escraches a los turistas en las playas, o sea acoso, que cuando lo hacen ellos es guay, y cuando se lo hacen a ellos, es fascista. O pintadas con profundos mensajes intelectuales como "El turismo mata"; no la guerra, el hambre o la contaminación... Todo eso en una nación España (perdón por palabra tan fascista), democrática y desarrollada, donde el turismo representa más del 10% del PIB y del empleo anual nacional. Estamos hablando de más de 100.000 millones de euros de ingresos y de más de 2 millones de puestos de trabajo. Y lo hacen con el argumento o excusa que ellos son los "progresistas". Olé.

El fascismo era el régimen totalitario, nacionalista, corporativo y belicista que tuvo Italia entre 1922 y 1944, hace 80 años. ¿Cómo va a ser lo progresista estar contra el progreso y jugar a cuanto peor, mejor? Algunos siguen empeñados en no adaptar su ideología a la realidad económica, sino tergiversar la realidad histórica para adaptarla a sus prejuicios. No pretenden reformar el sistema -con muchos defectos-, para mejorarlo, sino dinamitarlo. ¿Dónde hay más libertad, pluralismo y prosperidad que en Europa occidental? Persisten en indignarse, sea la excusa el ecologismo, la brecha salarial menguante o las pensiones crecientes. En romper España, arruinar la economía. Si la pobreza severa ha disminuido en el mundo del 35 al 15% desde 1990; si los países pre-capitalistas son pobres y los capitalistas son ricos: la culpa de la pobreza es del capitalismo. Si España es mediterránea con clima templado cálido, lluvias moderadas y abundantes monumentos, playas y fiestas, inventémonos que España es un engendro.

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