La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

La Esperanza

Hay amores que se mantienen y uno no sabe por qué. Gente que se tira de los pelos, que no hace más que discutir. Uno quiere comer sentado y de cuchara, y el otro prefiere el pincho en la barra.

Dicen que los polos opuestos se atraen, pero eso es sólo pasajero, luego la vida pide otras cosas. Sin embargo, parece que Esperanza Aguirre está empeñada en vivir un amor dañino y pasional y le da lo mismo con quien sea; primero le propuso el romance al PSOE y luego, al resto. A todos, hasta a Manuela Carmena, mujer antagónica de Esperanza donde las haya. Una cosa es perder la alcaldía y otra la cabeza. Una cosa es enamorarse y otra permitir la corrupción del amor. No me sorprendería que cualquier día se nos postule la Aguirre a próxima representante de España en Eurovisión. ¿Y si pierde? A no, perdonen, que ella nunca pierde? la Esperanza.

Compartir el artículo

stats