La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Ramón Díaz

Orientalia

Ramón Díaz

Carreteras peligrosas

Los gobernantes que nos han caído encima a cuenta de los votos y los pactos siguen empeñados en hacer las carreteras de este pequeño país del Norte cada vez más peligrosas. Buen ejemplo de ello es lo que ocurre en la del río Las Cabras, que une Posada de Llanes y La Robellada, en Onís. La nueva capa de asfalto se está echando sobre la antigua (sólo se rebajan mínimamente los bordes), con lo que la carretera está ganando nuevamente en altura con respecto al terreno por el que discurre. Tanto así que en buena parte de la vía más que arecenes hay precipicios, permítase la exageración. Y los vehículos, los caminantes y los ciclistas -se ve mucha bicicleta en esa zona- no tienen escape en caso de apuro. La carretera, aunque estrene firme, será más peligrosa. Y eso mismo pasa en los pueblos, donde las casas y las fincas están cada vez más empozadas. Eso sí, los gobernantes siguen cobrando como si lo hicieran bien.

Compartir el artículo

stats