La moción sobre el Hospital de Arriondas que ayer defendió el PP en la Junta General del Principado, aprobada por unanimidad, es un brindis al sol. No servirá para nada. La hubiera apoyado cualquiera, porque sólo incluye abstracciones, deseos, vaguedades y palabrería. Se reclaman "el planeamiento y ejecución de un marco integral de actuación en el hospital, que incluya la corrección de las deficiencias estructurales observadas y la adecuación del personal a las necesidades inherentes y propias de un hospital comarcal, cabecera de área, cubriendo suficientemente los servicios básicos" y "desarrollar un proyecto de futuro, claro y que garantice el futuro del hospital, así como sus prestaciones". Bla, bla, bla. La incoherencia llegó al máximo al apoyar la moción el PSOE, pese a haber negado segundos antes casi todas las carencias y deficiencias y tras asegurar que ya hay un proyecto de futuro para el hospital. Cháchara. Nada. Política.
