Ese pesimismo aniquilador hispánico, del que tanto habla el profesor Elías Díaz, unido a una partitocracia nefasta que encumbra a los serviles, impide a veces ver a los buenos políticos, que haberlos haylos, la mayoría en el ámbito local. El sábado dejaba de existir Jesús Fernández Niembro, secretario general de la Agrupación Socialista de Onís. Este albañil, culé hasta el tuétano, fue concejal durante 24 años, siempre al lado de Toño González Gutiérrez, con quien decidió compartir su trayectoria municipal y junto a quien abandonó el Ayuntamiento por voluntad propia; siempre en el PSOE, desde 1983. Jamás tuvo un sueldo público. Al contrario: ponía su coche al servicio del Ayuntamiento, pagaba los viajes de su bolsillo y gastaba tiempo y dinero para organizar todo tipo de eventos (Fiesta del segador, Certamen del quesu...) y hasta para reparar averías municipales. "Chusón" fue un buen político y, lo que es más importante, una buena persona.
