Llanes is diferent. El clima político -y en algunos ámbitos, social- se está haciendo insoportable. Es una "guerra" desatada. Es verdad que antes del cambio de gobierno -otros dirán de régimen- también había contienda, pero, básicamente, entre dos bandos: el PSOE por un lado y lo que los dirigentes socialistas llamaban "Frente del no", integrado por las demás formaciones, por otro. En aquel escenario, también salpicado de amarguras, resultaba más sencillo reconocer a los contendientes. Hoy es imposible. Hay tantos bandos y tan enfrentados entre sí que Llanes parece aquel Líbano en el que incontables facciones luchaban sin cuartel, todas contra todas. Hasta en el PSOE hay "críticos" con la "oficialidad"; pocos y muy callados, pero haylos. En casi todas las demás formaciones locales, ha habido deserciones y, sobre todo, decepciones. Eso al menos es lo que se oye en la calle. Sí, la calle, ya saben, ese sitio donde suele haber gente.
