La junta que impulsa la ruta interior del Camino de Santiago decidió ayer en Infiesto que sea incluida en el Inventario del Patrimonio Cultural del Principado de Asturias, pero que no sea declarada bien de interés cultural (BIC). Ello porque consideran que esta última figura es excesivamente restrictiva y afectaría tanto al Camino como a su entorno y, por lo tanto, a los particulares con propiedades junto a la ruta. Llama la atención que un bien de la importancia del Camino de Santiago, con una potencialidad turístico-cultural enorme, vaya a recibir una protección "de segunda". Aunque, en el fondo es lo mismo, porque en este otro pequeño país del Norte todo se queda en teoría, en declaración de intenciones y en grandonismo. Un ejemplo rotundo: la iglesia de San Antolín de Bedón, la "joya" del Románico en el Oriente es bien de interés cultural desde 1985. Pura teoría, porque en realidad está abandonada a su suerte por la Administración. Spain.
