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Ramón Díaz

Orientalia

Ramón Díaz

Esquivando palabras

Decía ayer en este periódico el cantautor Joaquín Sabina que lo políticamente correcto es insoportable, pues no permite ya hacer chistes de nada (¡Qué tiempos aquellos cuando aún se podía decir en público: "Esto era un francés, un inglés y un español...!"). Hay que medir cada palabra hasta el nivel cuántico, porque cualquiera puede ofenderse -al margen del espíritu del mensaje- no ya por una coma, sino por una comilla. Grupos étnicos, culturales o religiosos; colectivos gremiales; mujeres, hombres y viceversa; defensores o detractores de cualquier chaladura... Todos pueden sentirse atacados por cualquier acento. Así que andamos todo el tiempo con eufemismos y circunloquios, esquivando palabras. No se puede hablar de los empresarios, de los trabajadores, de los funcionarios, de los jueces, de los periodistas, de los ganaderos... Sólo se puede despellejar políticos. Eso sí es políticamente correcto en Spain.

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