Los chiringuitos son entes solidarios. Paran quince minutos la música y dejan de servir en solidaridad con los refugiados sirios. También los hay que entregan pegatinas de "Bienvenidos / as refugiados / as". Está muy bien, pero el único chiringuito que tuvo la idea de seguir sirviendo consumiciones esos quince minutos y donar lo recaudado a ACNUR fue el de las peñas del Real Oviedo. ¿Se imaginan a cuánto pueden ascender las ventas de tan sólo 15 minutos de todos los chiringuitos de San Mateo? Yo tampoco, ni idea, nunca se ha sabido ni se sabrá el dinero que nos dejamos los ovetenses y visitantes en esos bares efímeros. Ahora que la transparencia ha llegado al Ayuntamiento no estaría de más que se hiciesen públicas de algún modo las cuentas que seguro que están fiscalizadas. Los que consumimos en los chiringuitos estamos donando dinero a las asociaciones que los regentan y a muchos nos gustaría saber cuánto dinero y a qué va destinado.
