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Concejal del PP

Comisarios políticos en el Ayuntamiento

La actitud del tripartito hacia los funcionarios municipales

El concejal de Somos-Podemos Fernando Villacampa trataba de crear, en el artículo publicado el pasado miércoles en este mismo periódico, una cortina de humo tras la que ocultar un nuevo y esperpéntico desencuentro en el seno del tripartito ovetense. Con los argumentos cínicamente buenistas con los que habitualmente enmascaran sus más aviesas intenciones, este edil viene a decir que la ocurrencia de Somos de poner en marcha una redada contra numerosos funcionarios municipales para sustituirlos por directores generales puestos a dedo por los podemitas es una fórmula para responder a la frustración que les transmiten los empleados públicos "de estar desbordados ante la falta de personal y medios". O sea, que los mismos que, de forma vil, se atrevieron a cuestionar la profesionalidad de un funcionario de la calidad y prestigio del Interventor; los mismos que quieren descabezar la estructura funcionarial para campar a sus anchas y colocar a sus amiguetes para evitar todo control y sumisión a la legalidad, esos mismos, tratan de presentarse ahora como los valedores de los trabajadores públicos y dicen que sus razzias son -¡hay que tener cara!- "para despertar a esta ciudad".

Lo cierto es que han planificado una maniobra para destruir todos los mecanismos de control y de legalidad en el Ayuntamiento y no debe tranquilizarnos que el Alcalde haya dicho que no a nuevos directores generales porque, al mismo tiempo, anuncia el mismo ataque contra los jefes de servicio municipales, dando a entender que serán cambiados. ¿Por qué es una prioridad para un Gobierno municipal acabar con la estructura administrativa del Ayuntamiento? ¿Qué persiguen? ¿Están diciendo que personas con una dilatadísima carrera profesional, de calidad contrastada y de lealtad al Ayuntamiento demostrada (ninguno con carnet o militancia en el PP y todos con un curriculum profesional de acreditada solvencia) son hoy los responsables de que este Gobierno no haya hecho nada de nada en seis meses? ¿Están queriendo nombrar a personas afines ideológicamente para campar a sus anchas? ¿Es este de verdad el mayor problema del Ayuntamiento?

Lo cierto es que estamos asistiendo a la bajada de una más de las muchas caretas que ocultan el verdadero rostro de este tripartito. Y ya nadie sabe a qué intereses responden: baste decir que la nueva Relación de Puestos de Trabajo fue aprobada por UGT - y de forma tácita también por IU- y ahora es el PSOE quien la cuestiona y la quiere cambiar, siguiendo la postura de Somos. La razón no puede estar nada más que en un objetivo: ocupar la administración municipal con afines con carnet y amiguetes, perseguir a los funcionarios independientes que velan por la legalidad y generar un clima de inseguridad a los empleados públicos para que teman por sus salarios y sus puestos y así se sometan a los dictados del tripartito. Hay mecanismos legales suficientes para actuar contra el funcionario que no cumpla correctamente con sus obligaciones, pero ese no es el problema: el problema es que les sobran todos los que controlan la legalidad, no porque lo hagan mal sino, al contrario, porque lo hacen muy bien y eso impide que los ediles de Somos puedan perpetrar las tropelías que imaginan.

Señor Villacampa, lo único que despiertan ustedes es pánico ante el afán de revancha que les guía y su absoluta falta de respeto a la legalidad vigente. Quieren una nueva Madreña y necesitan comisarios políticos en vez de funcionarios independientes. Y lo peor es que luego vendrán nuevas razzias contra las asociaciones, colectivos, empresas o personas que no se sometan a sus dictados. Así es la democracia de Somos-Podemos, ¿verdad, señor Villacampa?

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