La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

La mar de Oviedo

Bolsa

Las grandes bolsas se hunden y Arcelor sufrió un descenso del 11 por ciento, al cerrar China sus murallas bursátiles por la huida masiva de inversores, y dicen que todo se complica con la caída del crudo. No entiendo ni papa. Si los inversores se van de China, alguno vendrá a Europa, y que baje la gasolina me parece buenísimo para España, dependientes como somos del petróleo, e importadores. En la economía de mercado, como en la meteorología capitalista, carecemos de un algoritmo que calcule si la lluvia, que perjudica al turista, es peor que el sol, que vacía los embalses; si es preferible el viento fuerte, que mueve molinos pero incendia bosques, el calor, que confunde a las flores, la bonanza, que permite a los pescadores salir a la mar, que es el morir, o la nieve, que incendia las calefacciones, resbala por el sendero y ya no veré en el monte a la que más quiero.

Compartir el artículo

stats