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Portavoz del grupo municipal de Izquierda Unida de Oviedo

Por un 8 de Marzo feminista

Los intentos del PP por firmar una declaración institucional vacía

Estamos hartas de repetir que el día 8 de marzo es un día reivindicativo. Un día reivindicativo con momentos para el festejo, para la celebración de estar vivas, juntas, en lucha y empoderadas. Pero un día reivindicativo. Un día en el que las mujeres al otro lado del océano se unieron para luchar por sus derechos laborales, como cúspide de la pirámide de todos los derechos que teníamos que conquistar. Y en esas seguimos: conquistando derechos, luchando y reivindicando. Y eso, compañeras, se hace desde la política feminista.

Es dramático que a estas alturas, con lo que ha llovido desde que a mediados del siglo XIX nuestras compañeras de las fábricas textiles de Nueva York tomaran las calles reivindicando mejoras en las condiciones laborales, haya todavía que escuchar en pleno marzo del 2016, y en boca de una concejala del Partido Popular: "?pretendéis combatir el machismo con el feminismo". Fijaos si nos queda espacio por conquistar.

La derecha pretendía aprobar una declaración institucional de esas de "corta pega" con mucha retórica y nada de contenido. Una moción institucional donde se veten conceptos como "libertad de elección de las mujeres sobre su maternidad, reconocer y respetar los derechos sexuales y reproductivos". Y otra vez la jerarquía político-eclesiástica de este país pretende borrar de un plumazo las conquistas, los derechos de la mujer, y si acaso, celebrar el día con actos lúdicos y festivos de "esos que les gustan a las mujeres" con maratones de aeróbic y manualidades en macramés.

Estos poderes fácticos azuzan al Partido Popular desde la sombra, en su papel de víctimas de persecución religiosa a las procesiones de la Semana Santa que nadie se cree, cuando lo único que se les dice es que sea la Iglesia quien las financie, respetando la separación Iglesia-Estado que defendemos.

Se trataba de una declaración institucional que decía tan poco, que se podía votar desde la izquierda, la derecha y el centro. Una de esas declaraciones que logra una foto en la prensa de todos con las manos levantadas votando un sí, que al día siguiente envuelve el pescado en El Fontán.

Este 8 de marzo afortunadamente, será un 8 de marzo sin declaración institucional y con una moción de este tripartito con contenido político, feminista y reivindicativo. Por supuesto que este gobierno lucha por la libertad de las mujeres sobre su maternidad, sobre sus derechos sexuales y reproductivos. Por supuesto que queremos derogar la reforma del PP que impide a las menores entre 16 y 18 poder interrumpir su embarazo libremente. No queremos que quepa ninguna duda sobre nuestro compromiso total con la lucha de las mujeres y por la igualdad efectiva. Alguien debería explicarle a la concejala del PP, que feminismo, no es lo contrario de machismo. Quizás tengamos oportunidad de hablarlo si coincidimos en la Semana Santa.

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