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La mar de Oviedo

Jisu

En la guía de Picos de Europa, de Miguel Adrados (segoviano, residente en Oviedo), apuntaba la fecha de mis escaladas. Hice el Jisu el 29 de agosto de 1981, por la clásica arista sur, de 600 metros de desnivel, en general sobre buena roca, aunque una tormenta de verano nos sorprendió a mitad de vía, de imposible retorno. Fui con dos ovetenses expertos, Toño Fierro y Herminio Sánchez; vivaqueamos en Áliva, al amanecer pasamos el collado Coronas y descendimos hasta la base del Jisu, para trepar en libre hasta los Costillares, donde estos días se encontraron a los zamoranos despeñados, y ahí nos encordamos para escalar el espolón propiamente dicho, de magnífica vista desde Potes. Si los cuerpos de Daniel, Rubén y Fernando fueron a parar en los Costillares, juraría que no escalaron más allá del primer pilar, llamado el Faraón, de tres largos, la parte más difícil de la escalada. Es todo, salvo mejor opinión.

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