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Crítica

Música sin "Brexit"

El español Juanjo Mena llevó con precisión, matices y flexibilidad a la Orquesta Filarmónica de la BBC en un concierto en el que el trompa avilesino Alberto Menéndez brilló interpretando a Strauss

La Orquesta Filarmónica de la BBC es una de las agrupaciones instrumentales más solventes de las seis que mantiene en activo la empresa pública de difusión británica. Su actual titular, el español J. Mena, mantiene, con su disposición a la interpretación de obras de compositores españoles y, en concreto vascos, la depurada energía y facilidad para la expresión melódica que ha caracterizado a la orquesta británica desde su fundación. El gusto por los compositores ingleses a caballo entre los siglos XIX y XX propicia una elegante comunicación de los materiales temáticos extraídos del folclore, en consonancia con lo que los nacionalismos musicales de la época asumirán en toda Europa. Esta sensibilidad hacia los materiales motívicos y el cuidado por perfilar sus características modales consigue que la Orquesta Filarmónica de la BBC trasmita, como pocas, el melancólico melodismo de sonoridades arcaicas del sinfonismo R. V. Williams. La "Obertura Las avispas", que abrió el concierto, mostró la flexibilidad de una orquesta que se mueve sin limitaciones a través de los contrastes agógicos y dinámicos al servicio de una expresividad más que presente.

La colaboración del trompa asturiano Alberto Menéndez con la Filarmónica de la BBC viene de lejos y responde a una fulgurante carrera cuyo reconocimiento no encuentra discusión a nivel internacional. En la actualidad, es trompa Principal de la BBC Scottish Symphony Orchestra. El "Concierto para trompa y orquesta nº 1 en Mi bemol Mayor" de R. Strauss es un buen ejemplo de las posibilidades de juego y expresión que caracterizan el buen hacer de Menéndez. Energía y bravura se unen por igual en una obra que otorga al solista un protagonismo inusual, acertadamente aprovechado por el avilesino para desplegar todas las posibilidades sonoras del instrumento de viento metal. Se echó de menos entre el público una propina, que no hubiera desmerecido en un concierto en el que el cansancio comprensible por la dificultad de la obra no se dejó entrever en ningún momento. Esperaremos otras ocasiones más favorables.

La "Sinfonía nº 1 en La bemol Mayor" de E. Elgar fue sin duda una de las sorpresas de la noche, no sólo porque el final de la misma sorprendió al público, que dudó en el merecido agasajo del aplauso, sino porque el maestro Mena realizó un minucioso trabajo de transparencia instrumental que quedó patente desde el primer movimientos. La precisión con la que la orquesta responde a las indicaciones de Mena y los matices que consigue en las diferentes secciones son, sin duda, una tarjeta de presentación de que la música no entiende de "Brexit".

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