¿Murió "Tola" atropellada? En el 89 salvamos dos esbardas en Tineo, "Paca" y "Tola", huérfanas de una asesinada, que adoptaron el nombre de sus salvadores. Las llevaron a Llanes, a Vic (Barcelona), al Hosquillo (Cuenca) y volvieron a Santo Adriano en 1996; un argayo en 2004 destrozó el cercado y tuvimos que llevarlas cinco meses a Cantabria. Se quiso que parieran y para ello trajimos de Cabárceno a "Furaco", un oso rumano nacionalizado cántabro, que yació con "Tola" y con los medios de información durante varios años, hasta que "Tola", vieja para estos menesteres, y con algunos huesos rotos en los acoplamientos, parió un nunca, un osito muerto. "Furaco", con 18 hijos de otras relaciones, regresó al valle del Pisueña; hizo más de lo necesario, captó mal el espíritu astur, montaraz pero suprasensible, que empataría mejor con un oso de peluche. Déjame acariciarte lentamente, déjame lentamente comprobarte...
