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Los levantinos, los últimos en sucumbir al encanto del Oriente

La notable presencia de visitantes de la zona mediterránea en el este de Asturias, huyendo del calor y atraídos por el paisaje, la gastronomía y los precios, fue una de las singularidades de un verano con lleno histórico

La playa de Borizu, en la localidad de Celoriu (Llanes), en pleno mes de agosto ramón díaz

Levante descubre el Oriente. Unos le echan la culpa al cambio climático, otros defienden que es una moda y no faltan los que aseguran que al fin los españoles se están "europeizando". El caso es que si hace unos años la gente del Norte "huía" hacia el Sur en busca del sol en cuanto tenía oportunidad, ahora ocurre justo al contrario: miles de personas residentes en las comunidades más meridionales de España, en especial las del Mediterráneo, se han acercado este verano a Asturias. El mundo al revés.

Un clima agradable, un paisaje espectacular, una gastronomía excelente (cinco estrellas Michelin en una comarca de poco más de 50.000 habitantes suponen todo un récord), unos precios contenidos y asequibles y la conjunción de mar y alta montaña en apenas media hora de viaje componen, según señalan los propios visitantes, las principales razones por las que la comarca del oriente de Asturias está en boga. La suma de todo ello ha dado como resultado un récord absoluto de visitas, y una ocupación cercana al cien por ciento durante buena parte de julio y agosto, el máximo histórico, algo impensable hace apenas dos años, cuando el sector turístico de la zona vivía los peores momentos de la última crisis.

El triángulo que forman Llanes, Ribadesella y Cangas de Onís (Picos de Europa) concentra la mayor parte de los negocios del sector servicios, la mayoría de l plazas hoteleras y buena parte del movimiento turístico. Pero municipios como Piloña, Parres, Ribadedeva, Cabrales, Onís y Colunga empiezan a destacar también en esta materia. Los concejos menos habitados de la comarca -las Peñamelleras, Caravia, Ponga y Amieva- son auténticos paraísos a descubrir, aunque quizá sea precisamente su tranquilidad, junto al paisaje, su mayor atractivo.

Aunque Madrid continúa siendo, con mucha diferencia, la comunidad autónoma que más visitantes aporta a la comarca oriental, seguida del País Vasco, se ha registrado este verano un importantísimo aumento del número de turistas procedentes de la Comunidad Valenciana, Cataluña y Andalucía, según han destacado la mayoría de los empresarios hosteleros de la zona. Todo ello sin olvidar que el turismo extranjero se ha multiplicado por veinte (o quizá por más aún) ya desde el pasado mes de junio con respecto a años anteriores.

José Antonio Sánchez Cueto, presidente de la Asociación de Empresarios de la Comarca de los Picos de Europa (Incatur), con sede en Cangas de Onís, subrayó que el verano está siendo "excepcional". Traducido a cifras: entre un 85 y un 90 por ciento de ocupación en julio y un lleno absoluto durante buena parte del mes de agosto. Los resultados están "muy por encima" de los de los años anteriores. "No lo esperábamos", señaló el empresario cangués, pues estos índices de ocupación no se registraban en el entorno de los Picos de Europa "desde hacía diez años, o más". Y ello con el añadido de que entonces el número de plazas hosteleras era notablemente inferior al actual.

¿Cuáles son los factores que han posibilitado este éxito turístico? Según Sánchez Cueto, varios; entre ellos, el fin de la crisis y las consiguientes "ganas de la gente de salir y consumir un poco más"; el incremento general del turismo nacional "por la mala situación que viven países como Turquía, Grecia, Egipto o Túnez", hasta el año pasado competidores directos, pues a ellos viajaban miles de turistas españoles; el tiempo, que este verano ha sido "sensacional"; que la comarca es "una zona barata", con precios muy contenidos; "la gastronomía y "el paisaje". Todo ese "cóctel" bien mezclado, unido a una "mayor alegría en el gasto", ha posibilitado los mejores resultados del sector turístico de la comarca "en mucho tiempo".

El dirigente de Incatur achaca el notable incremento de visitantes procedentes de Levante y Andalucía, además, a la "ola de calor" que se ha vivido en esas comunidades. Y también a la conclusión de la autovía del Cantábrico, que ha acortado el viaje a la comarca, más que en tiempo en sensación de cercanía. La apertura de toda la Transcantábrica en Asturias, el pasado mes de diciembre, se ha notado "mucho", pues "las comunicaciones son la base primordial para que la gente se mueva", indicó Sánchez Cueto, quien abogó por empezar a "tomarse en serio" otras formas de turismo hasta ahora poco vistas en el Oriente, como el "autocaravanismo", que ha registrado este verano un aumento espectacular.

Ángel Bada, presidente de Fomento del Turismo de Llanes (Fomtur), destacó que a Asturias la benefician "las olas de calor", pues los turistas huyen de ellas y buscan climas más suaves y agradables. "Por eso hubo tantísimos visitantes de Madrid y el centro de España", señaló el empresario llanisco, quien cifró la ocupación en el concejo en un 84 por ciento en julio (diez puntos por encima del año anterior) y el 95 por ciento en agosto, un 2 por ciento más que en 2014.

Bada destacó, además, que el turismo en Asturias, en general, tiene "mucha más calidad" que el del Sur y es "más tranquilo, pues no hay tanto desmadre". El empresario llanisco coincidió con todos sus colegas consultados por este periódico en la "excelente" promoción que el Principado está haciendo este año en el exterior. También en Llanes el "pilar" es el turismo procedente de Madrid, junto con el del País Vasco. Y también allí se ha notado "muchísimo" la culminación de la autovía con la inauguración del tramo Unquera-Llanes. "La autovía funciona para bien", señaló Bada, quien destacó que está obteniendo "muy buenos resultados" la promoción realizada organizando campeonatos de golf en el País Vasco con premios (bonos, menús y descuentos) fuera de temporada.

Sabino Martínez, presidente de la Asociación de Turismo Rural de Ribadesella (Aritur), subrayó que el verano ha sido "especialmente bueno" en la comarca; a su juicio, "el mejor en cinco años", lo que ha permitido resultados "equiparables" a los que se registraban "antes de la crisis". La recuperación del sector ha sido espectacular: "entre un treinta y un cuarenta por ciento más que el año anterior. Eso es mucho", añadió el empresario riosellano.

Martínez, a la vista de los resultados de su negocio y a falta de un balance general de todos los asociados, cifró en un 80 por ciento la ocupación media en julio y en un 98 por ciento la de agosto. "Y si no se alcanzó el cien por ciento fue porque en la última semana hubo mal tiempo", indicó. Como su colega cangués, destacó la fuerte caída del turismo en países como Turquía o Túnez como uno de los factores que ha hecho aumentar las pernoctaciones en España en general y en la comarca oriental de Asturias en particular. La "buena promoción", tanto por parte del Principado como de los propios establecimientos, la gastronomía y el hecho de que se comparta "el idioma y la cultura" son responsables del aumento del turismo nacional en el Oriente.

Pero es que en Ribadesella, como en el resto de la comarca, también ha aumentado mucho el turismo extranjero. Eso sí, "Madrid sigue siendo el 'number one', seguido del País Vasco", señaló Martínez, que añadió un matiz: el turismo vasco parece haber descendido en los establecimientos riosellanos, aunque tal vez esta circunstancia se deba a que muchos ciudadanos de esa comunidad autónoma tienen ya su segunda residencia en la comarca. Según el presidente de Aritur, el aumento más destacado en cuanto a número de visitantes ha sido este verano el procedente de "Valladolid, Palencia y Burgos". ¿Razones? Según Martínez, la apertura de dos autovías, la del Cantábrico y la de Cantabria a la Meseta ha dejado estas provincias y el resto del centro de España "a tiro de piedra. "Son apenas dos horas y media o tres de viaje. Sin duda las autovías ayudan mucho y la apertura del tramo Unquera-Llanes (que se inauguró con casi veinte años de retraso sobre las previsiones iniciales) ha abierto muchas puertas", añadió.

En todo caso, el turismo ha cambiado. Mucho. Si antes la mayor parte de los visitantes se quedaban una, dos y hasta tres semanas en los establecimientos hosteleros, ahora "la gente viene dos, tres o cuatro días, porque quieren conocer muchos sitios", indicó Martínez, quien ya auguró tras la Semana Santa, al ver los excelentes resultados, que el verano sería excelente.

Y el verano aún no ha acabado: el presidente de Aritur subrayó que la primera quincena de este mes de septiembre está siendo "buenísima", y que sólo el inicio de las clases en las escuelas y los institutos hará que la ocupación baje a partir de este fin de semana. "Además, el tiempo ya refresca, y eso condiciona", añadió.

La estacionalización continúa siendo el enemigo a batir, aunque también los alquileres de casas y apartamentos particulares "hacen daño". Martínez destacó que cualquier propietario tiene perfecto derecho a alquilar su casa, pero la ley prohibe que la anuncie en webs turísticas, algo que no siempre se cumple. "Pueden alquilar, pero no pueden anunciarse como negocios turísticos y deben declarar a Hacienda los ingresos", añadió el empresario.

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