Tras leer el titular de este reportaje, seguro que esperabas encontrar algún GPS para la montaña o alguna mochila especial. Pero entonces no estarías leyendo el Cyberdiario. Nuestros gadgets para ir de acampada son útiles, originales y divertidos por igual.
Una vez pertrechados con la tienda, el saco de dormir y la mochila, hay que pensar en esos elementos que son imprescindibles en la montaña. Uno de ellos es la linterna. Nuestra linterna debe ser estanca, impermeable, antigolpes y con gran autonomía. Si además sirve para llevar en su interior el móvil, mejor. Así es la Peli 9000 Light Case -73 euros-, una linterna LED a pilas en cuyo interior podemos llevar el móvil o las llaves del coche y que flota si se cae al mar.
Otro elemento imprescindible es la batería para cargar el móvil. Y no la hay como la Rokpak Pioneer -200 euros-. Este cargador rápido de 12.000 mAh. es capaz no sólo de almacenar energía, sino que una vez se ha descargado, y gracias a sus placas solares, permite seguir cargando el móvil, el iPad o una cámara de fotos compacta con la energía del sol. Es estanco, tiene linterna, y en caso de emergencia se puede activar la señal internacional SOS. En su interior se pueden albergar hasta tres móviles, llaves o unas barritas energéticas.
Si algo va a cambiar la forma en la que vamos de acampada son las fotos y vídeos de realidad virtual. Samsung ya ha lanzado su cámara Gear 360 -350 euros- y a partir de ahora todo será distinto. La experiencia es única, y ver una excursión por el bosque es sencillamente mágico. Los vídeos time lapse adquieren otra dimensión y las fotografías son espectaculares. Esta tecnología podría suponer toda una revolución.
Para sacarle todo el partido a una cámara 360 hace falta un buen soporte para llevarla o para dejarla fija en un sitio. Hama acaba de lanzar el nuevo trípode Traveller Premium Duo -120 euros-, de calidad profesional, que es perfecto para llevar de acampada, ya que tiene su funda y plegado tan sólo mide 34 cm. Además, con 1,2 kg no es una gran carga, y lo mejor es que se puede convertir en monopie o, lo que es lo mismo, un enorme y largo palo "selfie" de más de metro y medio con el que grabar unos vídeos impresionantes. Su versatilidad hace que se pueda colocar sin problemas sobre rocas o cualquier suelo de montaña.
El campo no tiene problemas para hacer volar un dron. La francesa Parrot es la número uno en drones domésticos. Sus minidrones Airborne -desde 100 euros- son diversión en estado puro cuando estás en medio del campo, especialmente si hay niños de por medio. Además, a los modelos Night -130 euros- como el que hemos probado se le iluminan los ojos, con lo que las carcajadas nocturnas se multiplican. Seguro que te mueres por irte a pasar el fin de semana al monte.
