El ovetense Fernando Calvo, residente en San Roque (Llanes), empezó en la montaña siendo un crío. Con 15 años fue de excursión a los Picos con el grupo de montaña Auseva de Oviedo. El guía era Erik Pérez. Subieron al Urriellu un día de la Constitución y pasaron una semana en un refugio. Entonces supo que quería "ser como Erik". Así se lo dijo. "Ahí comenzó todo", señala. Afirma que Erik y Chamoso, los "viejos" (lo dice con cariño y admiración), enseñaron a los demás y "abrieron la ruta a seguir". En 1996 hizo la ruta del Cares 42 veces con clientes y lleva veinte años como guía, en los que habrá acompañado a unas 1.000 personas por los Picos. Pero también ha guiado en los Pirineos, los Alpes, la Patagonia, Nueva Zelanda, Turquía... Pese a lo cual se considera "un guía de montaña de pueblo".