-Soy de 1962 por unes hores. Soy de les 12 la mañana del 31 diciembre. Nací en casa mi güela, donde vivíen mis pas, en la calle la Estación, en Villalegre. Al llau casa está la Azucarera, quedaben quintanes d'aldea y algo de ganáu, cases de indianos, casino y al tiempo estaben construyendo el barrio de La Luz pa acogida de emigrantes de Ensidesa.
-¿Tiene hermanos?
-Unu, año y medio mayor, Gelo, y una, de 14 años menos, Rita.
-¿De qué vivían en su casa?
-Mi padre, Antón Elipe, yera marineru. Trabayaba en la draga de la Junta de Obres del Puerto y Ría de Avilés y acabó siendo maquinista. Empezó de manera llamativa: en la posguerra del estraperlu, pilláronlu con 16 años entrando en la zona de la junta y dijeron: "Ah sí, castigáu, y vas a venir a trabajar aquí". Y hasta que morrió.
-¿Conoció a su abuelo paterno?
-No, ta enterrao en una fosa común porque fue secretario del alcalde de Avilés y fusiláronlo en el Coto, en Xixón. Con 9 años, el día de Todos los Santos, íbamos al cementerio y no entrábemos. La fosa común taba ahí, porque matáronlos en la tapia.
-¿Cómo es su madre?
-Irene Raposo trabayó de cocinera en un bar en Ponga al poco casase y fue costurera y bordadora. Cuando estabilizaron, dedicóse a cuidanos. Sus padres eran gallegos de Lugo. Mi abuelo venía construyendo la carretera de Galicia a Asturias. Mi madre nació en Bres (Taramundi). Vivieron un tiempo en Villalegre y allí se conocieron mis pas.
-Primeros recuerdos.
-Les víes del tren y la Azucarera, de la que quedaben alguna chimenea y ruines. Fue polvorín republicano. Agarrábemos bales que quedaben y intentábamos explotales. Y el colegio nacional de Villalegre con 5 años. Patio, formábemos, niñes y niños separaos, cuadrase, bandera y cantar el "Cara al sol".
-¿Creció con su hermano?
-Sí, igual pandilla, fútbol y trastaes xuntos. Cuando iba a nacer la mi hermana reuniéronnos en la cocina , "tenemos que deciros algo". ¡Mecagun, qué gordo! Era eso.
-¿Cómo era su padre?
-El típico paisanu asturiano, garraba el tambor, organizaba, gustáben-y la tonada y les rancheres, que ponía en cintes de casete. Los domingos iba a echar la partida en la sidrería Luisa Villaverde, chigre a la entrada y patio con bolera, rana y llave. Crecí en un ambiente rural en Avilés.
-¿Cómo era con ustedes?
-Permisivo, muy cariñoso. Traía "Asturias Semanal", me interesó l'asturiano y me pagó la cuota de Conceyu Bable a los 13 años.
-¿Cómo era su madre?
-La típica ama de casa, muy pendiente de nosotros. Fízome unes sábanes cuando nací y, en vez de anxelinos, vio a Elvis Presley en una revista e intentó bordarlo con una guitarra eléctrica. Era cariñosa y también de zapatilla con efecto: torcíemos la vuelta'l pasillo y la zapatilla también. Cuando empecé en la música fue superpermisiva. En los ochenta, con la mantada punkis en La Exposición, taba sentada en la grada con paraguas viendo al fíu dar saltos.
-¿Qué tipo de rapacín era usted?
-Bastante buenu, pero armamos algunes gordes. Tendríemos 10 años, pusimos chapes para que les achaplara el tren, debimos poner algo más gordo, era una curva, iba lento y se salió una de les ruedes. Nos fueron a buscar. En Comisaría nos metieron muchísimo mieu.
-¿Por qué le interesó el asturiano?
-Mi güela era falante d'asturiano del centro, de Avilés. Sabía lo de toles families: los tataguyos, los cagaratos. Llamábame Xilimbra, que tienes les pates d'alambre. Siempre pensé que yera una persona de verdad, pero ye un personaxe del villalegrín José María Malgor, "Cuentos de Xilimbra", que fueron muy famosos. Nunca quería llevar pantalones cortos por les pates delgaes, y el profesor mandaba remangame con la vara por decir "ye" o por decir "les vaques".
-¿En serio?
-Recibí curioso de la vara plástico con pica de metal. También íbemos de monte al Marapico, pasábemos a Corvera y en esi camín ta Xunceo. Un día apareció un cartel que ponía "Juncedo". Pregunté: ¿y eso?, y mi pá dijo: "Eso son los del MOPU". Tenía 12 años y pensé: aquí pasa algo.
-Así que el asturiano era su abuela...
-Mi padre era buen falante y leía. Cuando empecé a interesame por el bable me consiguió una edición de "Xente y barrios d'Avilés", de Bernardino Guardado, dedicáu.
-¿Cuándo le empezó a gustar la música?
-De siempre. Cuando oía a mi padre aquello de ranchera y tonada de aquélla horrorizábame. Cuando el Nuevu Canciu Astur, acuérdome sentir por casa les cintes de Avelino y de "Nuberu".
-¿Y la música de su tribu?
-El mi hermanu interesábase por el rock duro, "Led Zeppelin", "Deep Purple". Yo, con 15 años, vi un "Informe semanal" sobre el punk en Inglaterra. Me sorprendieron mucho les pintes, el discursu y lo de que "no hace falta saber música para hacer música". Si tienes algo que decir, no importa tanto el cómo sino el qué. Ahora los guajes de 13 años no tienen nada que ver con nosotros.
-¿Por qué lo dice?
-Pasar de lo que se vivía con Franco a los partidos políticos, que los sabíamos como la alineación del Real Madrid, era excitante. En 1974, en el colegio San Fernando, privado pero laico, dos en moto tiraron unos papeles. Fuimos pensando que eran cromos de fútbol y eren panfletos del FRAP (Frente Revolucionario Antifascista y Patriota) contra los fusilamientos de Burgos. Garré uno. Después pasaron los profesores, aula por aula, pidiendo que entregáramos los papeles y diciendo que el que los llevara pa casa sería castigado.
-¿A qué edad fueron a vivir a Avilés?
-A los 17 años. Ya andaba por bares de rock and roll: Estados Ruidos, en La Ferrería, y El Araña, en Sabugo. Mi tribu asturianista escuchaba gaita y tenía otra pandilla rockera. Más de mayor íbamos al Kactus, primero en San Xuan de Nieva, luego en la calle Rivero. Había música en directo.
-¿Qué tipo de joven era usted?
-Muy tranquilo pero muy inquieto. Responsable por la muerte de mi padre.
-¿Cómo fue?
-Se despide por la mañana y, no me acuerdo si doblaba, pero sí que nos acostamos y me despertó mi madre: "Que no viene tu padre", empezamos a indagar y avisaron de la Junta de Obras que tuvo un derrame cerebral, que habíen llamao a la ambulancia y no llegó vivo a Oviedo.
-¿Cómo quedaron?
-Mi madre, destrozada, el piso recién comprado y una pensión pequeña; mi hermano taba en la mili, sin sueldo, en un barcu de guerra dando la vuelta al Estáu español. Diéron-y permisu pa venir y al día siguiente volvió. Mi hermana tenía 3 años.
-¿Y usted?
-Hacía COU. Fue duro. A los diez días vinieron a Avilés "The Boys of the Lough", un grupo escocés de música folk de los que tenía todos los discos. Mi madre dijo: "Escuché que veníen unos de esos que te gusten". Ya, pero cómo voy a ir. Mi madre dijo: "Era lo que faltaba". Fui. Me puse atrás del todo en una esquina para que no me viera algún pariente.
-¿Qué quería hacer?
-Periodismo, pero no había dinero en casa. Empecé Geografía e Historia y aguanté un año. Estaba con la cabeza en otra cosa. Hacía mucha militancia en Conceyu Bable, estaba muy metido, llevamos la secretaría de cultura y hacíamos les fuelles. Hice programas de Conceyu Bable en Radio Asturias. Estaba Xuan Bello, muy mozu.
-¿Todo era bable?
-No, iba de conciertos, leía los cómics de "Makoki" y "El Víbora", mucho ensayo, y escuchaba tola música que podía. De folk y rock, "Live in Dublin", de Alan Stivell... y el primero de "The Clash".
-¿Cuidó de su hermana pequeña?
-Sí. Llevábala al dentista... Cuando Conceyu Bable desapareció, se montó la Xunta pola Defensa de la Llingua Asturiana, fui uno de los promotores, con Adolfo Camilo Díaz, y quedábamos para hacer murales y llevábamos a Rita con el mandilón a que pintara.
-Pasó a la militancia política.
-Yera reticente a mezclar la cuestión lingüística con la política. En Conceyu Bable había xente del MC y del PSOE. El PSOE era el partido hegemónico en Asturies, no estaba por ello, y llegué a la conclusión de que o hay una respuesta política o esto no tira p'alante. Haciendo Geografía conocí a los de Xixón y Llangréu del Ensame pegando una esquela de la nación asturiana. Allí entré en 1982.
-¿Cómo participó?
-Organizamos el conceyu d'Avilés. Seríemos sesenta en Asturias y media docena en Avilés. Estaba César Maniegu (Cesáreo Fernández), que fundó conmigo "Dixebra". Reuníemonos en la sidrería Alvarín, de serrín en suelu, calle La Ferrería, al llau del Ayuntamiento.
-¿Sus temas de debate?
-Yéramos muy idealistes: derecho de determinación de los pueblos y normalización lingüística, y dexábemos pa prau los temas que de verdad importaben a la xente. Tenía un archivo con recortes de periódicos sobre los movimientos de liberación de los pueblos en Europa: corsos, occitanos...
-¿Cuánto militó?
-Unos cuantos años. Luego xuntamos cola Xunta Nacionalista Asturiana, onde taben Lisardo Lombardía, Inaciu Llope... y se fundó la UNA, luego PAS-UNA, Xuan Xosé, y me desvinculé. Estuve un poco en Andecha Astur y fui candidato a Avilés.
-¿Por qué hizo graduado social?
-Eran tres años y reválida. Me permitía sacarla en poco tiempo, había una motivación política, era práctico. Tenía dos salidas: sindicatos y jefes de personal. Me interesaba la primera: defender a la clase trabayadora.
-A los 24 años montan "Dixebra", en 1987. ¿Tocaba algún instrumento?
-Nada. Tenía nociones de guitarra mínimas del colegio. No me veía con aptitudes pa facer música o tocar un instrumento, pero sí fui consciente de que soy un buen comunicador y estaba muy convencido de lo que pensaba. César venía del Ensame y tocaba la guitarra en otros grupos de Avilés.
-¿Qué querían hacer?
-A través del Ensame visitábamos el País Vasco, y conocí lo que se llamó el "Rock radical vasco". "Kortatu", "Hertzainak", "Zarama", "La Polla Records". La discográfica me enviaba copias de todo para mi programa n'asturiano en Radio Popular de Avilés de 8 a 9 de la mañana los sábados, que duró tres años. Después César y yo ficimos el programa "Falamos", en Radio Marea.
