La ovetense María Cañal, arquitecta de interiores, acaba de publicar "Guía de Asturias con niños" (Ediciones Nobel), en la que ofrece todas las pistas posibles para aquellos padres que quieran recorrer la región con sus pequeños ofreciéndoles toda la diversión posible. En esta página, Cañal, autora del blog "Escarabajos, bichos y mariposas", selecciona para LA NUEVA ESPAÑA las diez mejores pistas para pasar un día inolvidable con los pequeños de la casa.
1 Ruta mitológica. El "Camín encantáu" es una ruta senderista que recorre los tradicionales y ejemplares pueblos del valle de Ardisana, en el concejo de Llanes. Esta ruta tiene un encanto especial porque nos permite aprender sobre la mitología de nuestra tierra. Niños y mayores disfrutaremos mientras realizamos juntos una peculiar búsqueda del tesoro, cuyo botín se compone de tallas de madera con los personajes de la mitología asturiana y su descripción: el trasgu, el sumiciu, el cuélebre, el busgosu... Una preciosa ruta llena de misterio y de imaginación.
No te puedes ir de la zona sin probar los tortos de maíz o las verdinas tan típicas del valle en Casa Xisco, en Mestas de Ardisana.
2 El oasis escondido de Lugones. Picnic en el área recreativa del parque de La Acebera en Lugones, un oasis verde al lado de Oviedo con lago, cascada, impresionantes vistas, zona de juegos, bancos, fuentes, parrillas y unas sendas preciosas para dar paseos... Son 340.000 metros cuadrados que cuentan además con 2.000 especies vegetales. Es ideal para ir a pasar el día, para acercarse a la naturaleza o para practicar deporte. Un consejo: si buscas tranquilidad, no te quedes en las primeras mesas. Merece la pena adentrarse un poco en el bosque.
3 Una playa ideal. Playa de Poo (Llanes). Esta playa es ideal y está entre las diez mejores playas asturianas para ir con niños porque, por su forma de ensenada, se convierte en una piscina natural de agua salada cuando está la marea alta. Con muy poca profundidad, es una playa familiar con una zona de baño totalmente segura. En verano es tan popular que no es fácil encontrar sitio para aparcar.
4 Cometas. Festival de cometas de la playa Espasa, que se celebra el 3 y el 4 de junio con cientos de cometas volando. Playa Espasa es un arenal grande, cómodo y familiar en el límite del concejo de Caravia y Colunga. Es precioso, de arena dorada y con olas para los surferos, pero además es el sitio perfecto para volar cometas. Su festival acoge visitantes de toda España y se pueden ver cientos de cometas de todos los tamaños volando.
5 A la luz de un faro. Visitar un faro. Por ejemplo, el faro de Cabo Busto (Valdés). ¡Los faros son tan bonitos! Siempre están en sitios preciosos con vistas alucinantes. Los faros son siempre una excusa para una buena historia sobre barcos hundidos, piratas y grandes vendavales. El de Cabo Busto es de 1858 y está rodeado de altos acantilados. Como curiosidad, este faro emite cuatro destellos cada veinte segundos que son visibles a 21 millas de distancia. Y para los golosos, la pastelería Cabo Busto siempre es un acierto (sólo abre al público los fines de semana).
6 El "metro" de los Picos. El funicular de Bulnes. Este tren funicular hace el recorrido entre Puente Poncebos y Bulnes, atravesando la peña Maín en siete minutos. Una maravilla de la ingeniería que nos deja en el precioso pueblo de Bulnes, en plenos Picos de Europa y que sin duda es una aventura para los más pequeños.
7 Cosechando. Recoger frutos rojos en El Malaín de Villaviciosa. Recoger tus propios frutos es una delicia. El contacto con la naturaleza y poder escoger tus propios arándanos, grosellas, moras... hace que los niños se vayan a casa felices con la experiencia. La liana y la casita en el árbol son otras de las grandes atracciones de este clásico del verano. ¡No te puedes ir sin probar el helado de arándano y frambuesa! Los mejores meses para ir son junio, julio y agosto, siendo julio el mes estrella para la recogida.
8 Haciendo el indio. Dormir en un tipi en el albergue Casa Carmina en Muros de Nalón. Este albergue de peregrinos es un lugar muy estiloso en Muros de Nalón. Además de habitaciones con literas, cuenta con una habitación doble independiente. Ofrece una cocina muy natural, con productos de la huerta, que ellos mismo cultivan. Pero lo que va a enamorar a los niños es el tipi que tienen en su jardín. ¡Una aventura!
9 Aventuras. Parque de aventura del Sella, cerca de Arriondas. A qué niño no le gusta trepar por un árbol. Pues en este parque lo van a poder hacer subiendo cuatro o siete metros de altura, con pasos entre troncos, tirolinas, pequeñas cabañas... Por supuesto con la seguridad probada. ¡Un planazo para niños y mayores!
10 Haciendo madreñas. Museo de la Madera en Veneros y el Taller de la Madreña en Pendones. Se pueden visitar las dos sedes. En Veneros veremos la variedad de árboles y sus utilidades, como la construcción de edificios (casa, cuadra y hórreo) y la fabricación de diferentes útiles (llabiegos, angazos, truébanos, etcétera), y a 9 kilómetros, en Pendones, en un antiguo lavadero rehabilitado los artesanos nos enseñan en directo cómo se trabaja la madera para hacer las madreñas.
