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Mujeres: la paradoja del salto atrás

Tras décadas de educación sexual y políticas de igualdad crecen los embarazos no deseados y el maltrato entre las parejas jóvenes; los cambios derivados de la digitalización de la sociedad tienen mucho que ver en ello, advierten los expertos

Mujeres jóvenes en la manifestación feminista del pasado 8 de marzo en Gijón. JUAN PLAZA

Lo alertan los ginecólogos del Principado con los datos en la mano: cada vez hay más embarazos no deseados entre adolescentes en Asturias y, por lo tanto, más abortos. Algo falla en la educación sexual que no acaba de calar entre los más jóvenes, que han descuidado en los últimos años el uso de métodos anticonceptivos, con los riesgos que ello conlleva ya no sólo por los embarazos no deseados, sino por el riesgo de contraer una enfermedad de transmisión sexual. Pero no sólo el aumento de embarazos no deseados preocupa a los expertos. Sexólogos, educadores y sociólogos apuntan otros datos que también preocupan: aumenta la violencia de género entre adolescentes, asciende el control de la pareja utilizando el móvil, y las jóvenes son cada vez más permisivas con este tipo de actitudes machistas que muchas veces confunden con el amor y que son el caldo de cultivo de futuras agresiones.

Las cifras del año pasado en Asturias desvelan que el número de menores que tuvieron que ser protegidas de sus novios se duplicó en los últimos cinco años. Si en 2011, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), fueron dos los adolescentes asturianos acusados de agredir a sus parejas, en 2017 la cifra se disparó hasta los cinco denunciados. Dos de ellos ingresaron en el centro de menores de Sograndio. El Principado se coloca así a la cabeza del norte, junto con el País Vasco, en número de denuncias de este tipo. En 2017, diez chicas asturianas menores sufrieron agresiones de sus parejas, la segunda cifra más alta del norte después de Galicia, donde hubo 21 víctimas.

Algo se está haciendo mal y en pleno año 2018 la sociedad ha dado un paso atrás. Pero ¿por qué? Éstas son las claves que dan los expertos.

Falta educación en igualdad

"A pesar de que aumentamos la educación sexual, no acabamos de conseguir una verdadera educación en igualdad". Lo explica Sandra Losada, socióloga e investigadora de violencia de género. Vivimos en una sociedad en la que los estereotipos que son tendencia para los adolescentes transmiten unos valores poco adecuados. Un ejemplo, el programa 'Mujeres, hombres y viceversa', donde hombres musculados y mujeres esculturales luchan por conquistar a un chico o a una chica que se sienta en un supuesto 'trono'. Se transmite que la mujer es un objeto sexual y que tiene que ir divina de la muerte, ejemplos pésimos para nuestros adolescentes", concreta Losada. Pero estos valores, tan alejados de la igualdad entre hombres y mujeres, se maman desde los dibujos animados, donde las mujeres aparecen como "princesitas perfectas y calladitas", esgrime la experta. No hay que olvidar que una de las modas que triunfan para la celebración de cumpleaños entre niñas a partir de 8 años es "ir a un salón de belleza a que les hagan la manicura. Los padres muchas veces no están de acuerdo, pero ceden para que sus hijas no sean diferentes del resto", concluye Losada.

Mucha información, poca formación

¿Qué ocurre cuando un adolescente pone en un buscador de internet "píldora del día después" para informarse? "Pues lo primero que encuentra son foros de usuarios donde mucha gente da su opinión y se dicen mentiras que luego muchos jóvenes asumen como verdades. Por ejemplo, que la píldora sólo se puede tomar tres veces en la vida o que cuando la ingieres te tiene que bajar la regla al quinto día", afirma Soraya Calvo, profesora del departamento de Ciencias de la Educación de la Universidad de Oviedo. Explica Calvo que aunque la competencia digital es una de las que aparecen recogidas en el currículum educativo, "no se trabajan pautas de cómo buscar información veraz. Esto es esencial para los alumnos". Calvo sostiene que la competencia digital debería tener una mayor presencia en el currículo, y no trabajarse sólo a través de talleres o jornadas: "Se necesita continuidad en las aulas para que los aprendizajes sean significativos".

El porno accesible

"Tengo la sensación de que la educación sexual de nuestros adolescentes y jóvenes es el porno, así que obviamente no habrá prevención". Es la dura afirmación del sociólogo José Calvo, que insiste en que "ni en los colegios se trabaja la educación sexual ni la mayoría de los padres tratan estos temas con sus hijos". Además, advierte Calvo que existe una presión social importante sobre los jóvenes que les incita a tener relaciones sexuales en edades muy tempranas y con "una ignorancia absoluta de las consecuencias". Los expertos consultados aseguran que todas estas variables dan lugar a una auténtica bomba de relojería que ha disparado las conductas machistas entre los jóvenes, la permisividad de las chicas con ese tipo de actuaciones y un repunte de los embarazos no deseados. Pero también hay que tener otra variable en cuenta, tanto en que se den más casos de violencia como en el aumento de los abortos en edades jóvenes. "Ahora somos más sensibles con esas actitudes y también se denuncian más. En cuanto al aborto, quizá tenga que ver que ahora las chicas jóvenes pueden recurrir a la Seguridad Social para la interrupción del embarazo, antes tenían que recurrir a clínicas privadas o incluso se iban a Londres. También podemos sacar esa parte positiva, que las chicas tienen la libertad de poder interrumpir el embarazo y que somos más sensibles a actitudes machistas y se denuncian", concreta Soraya Calvo.

Youtubers e influencers

El acceso a internet permite llegar a la información en décimas de segundo, pero, ojo, hay que reflexionar sobre la influencia que tiene sobre los jóvenes la conducta de sus ídolos, a los que admiran y siguen a pies juntillas hagan lo que hagan. Los controles de internet y de las redes sociales de los adolescentes por parte de los padres es un tema en el que los expertos no se ponen de acuerdo, salvo en dos postulados: uno, que se necesita una reflexión profunda sobre el uso y el impacto de estos medios en la sociedad actual, y dos, que los jóvenes actuales son totalmente dependientes e influenciables por lo que ven en las pantallas. Explica un caso Soraya Calvo. Dalas Review es un youtuber de éxito. Tiene sólo 23 años y dos denuncias por violencia de género de sus exparejas, que le acusaron de ser chantajeadas y acosadas por él. "Los seguidores de este chico asumieron que la culpa era de ellas", explica Calvo, que alerta de la peligrosidad de los referentes de los chavales y de los mensajes que transmiten. "La repercusión de las redes sociales en la sociedad nos ha pillado en bragas", concluye.

Escasas campañas

Quizás no se sabe tanto de sexualidad como se cree. De hecho, todos los expertos consultados por este periódico coinciden en que se necesita reforzar las campañas publicitarias y también la enseñanza en los colegios. "Es normal que una persona con una vida sexual normal tenga al menos una vez en su vida una ETS (enfermedad de transmisión sexual). Con las infecciones no hay percepción de riesgo social y tendemos a relacionarlas con gente marginal cuando en realidad son muy comunes. Se necesitan más campañas en la televisión para concienciar a la juventud, y desde luego concienciar desde los colegios y las familias", advierte la educadora Soraya Calvo. Falta información, y educación que sea veraz y que disipe las dudas de los más jóvenes, para no tener que lamentar infecciones o embarazos no deseados. "Hay que educar desde edades muy tempranas", apostilla Sandra Losada.

Dependencia de las pantallas

"Los chicos de hoy en día son totalmente dependientes de las pantallas, ahora queda constancia de todo; antes mandabas una carta y no dejaba rastro", lo explica Jacobo Blanco, que añade que el peligro viene dado porque "estamos ante actitudes tradicionales aderezadas con nuevas tecnologías, hay una personalidad muy liberal y poca información, nos encontramos con chicos que defienden la pena de muerte y dan argumentos que no tienen ninguna lógica". La misma opinión esgrime Calvo, que asegura que "se está perdiendo la perspectiva crítica". Dicen los expertos que es común que los jóvenes de ahora permitan actitudes machistas porque confunden los términos. Un ejemplo, ven normal que sus parejas les vigilen los móviles, saltándose a la torera el derecho a la intimidad. "Nos encontramos con una paradoja, hemos pasado del pensamiento encorsetado a la libertad y tolerancia de cualquier pensamiento. Además, hay un choque claro entre las feministas y las chicas que aceptan el rol de la masculinidad por complacer a su pareja", sostiene Jacobo Blanco.

Estas seis claves son muestra de que la sociedad actual ha desembocado en un aumento de los embarazos no deseados y de actitudes violentas entre parejas cada vez más jóvenes. Los expertos reclaman que tanto las administraciones como los padres y educadores reflexionen sobre estos porqués, porque sólo con la implicación de todos ellos se puede impedir que sigamos dando pasos atrás en cuestiones que quizá creíamos superadas, pero que las redes sociales, internet y los jóvenes nos han vuelto a poner de actualidad. La realidad es ésta.

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