Maxi Rodríguez

Sumiller

Maxi Rodríguez

Experiencia sublime

AT Roca ya navega a velocidad de crucero. Les voy a refrescar la memoria por si no recuerdan la historia de esta bodega. AT significa Agustí Torelló. Probablemente ya se sitúen, pues ese nombre fue revolucionario en el mundo del vino allá por los años noventa. De su mano se introdujo una nueva manera de pensar, elaborar y comercializar el cava. Un concepto que parió una mente lúcida y brillante como la de aquel joven Agustí que desconozco de dónde sacaba las horas para patear España y el mundo entero dando a probar botellas. Recuerden que Agustí, debido a fuertes desavenencias familiares, se escindió de la casa madre y ahora continua junto a su hijo en el proyecto AT Roca que con solo un par de añadas a su espalda se ha convertido en el espumoso de cabecera de exquisitos consumidores. Su brut rosado es de aúpa, lo recomendé en su momento, espero que me hayan hecho caso.

Después de una larga jornada de trabajo, cuando ya estás recogiendo los trastos del negocio, se te presenta Agustí y te dice "Maxi pon un par de copas y relájate", los ojos te brillan intensamente. Si además abre una preciosa botella de espectacular apariencia y saca de una pequeña nevera un par de ostras Louis procedentes de Marennes en la Francia atlántica, carnosas y con pronunciado sabor a mar, el éxtasis es mayúsculo. Así fue como conocí este espumoso reserva de barrica. Agustí juega con las cartas marcadas, es un perfecto tahúr que sabe lo que se trae entre manos.

Uvas macabeo (viura) procedentes íntegramente de la ecológica Viña Esparter a 430 metros de altitud que le aportan una frescura poco habitual. El vino permanece siete meses en barricas y treinta meses en botella sobre sus lías. La madera ni se nota pero colabora a dar un fondo espectacular al espumoso convirtiéndolo en un vino elegante, complejo y goloso pero con una finura y carácter propios de los grandes vinos. Bravo Agustí!!!!

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