Cada viernes como hoy, en todos los informativos de la televisión pública. Cada vez que vea a una reportera, a una presentadora o a una corresponsal vestir de negro ante la cámara, sepa que, además de la noticia de la que le está informando, le está transmitiendo que esa información que usted está recibiendo quizá no sea veraz. Quizá haya sido redactada por una redacción paralela de contratados temporales afines o más sumisos a los intereses de la dirección. Quizá tan sólo se le esté contando una de las dos versiones en un conflicto, o sólo se le estén mostrando las imágenes que ratifican los relatos que convienen al Gobierno. Quizá se está contando la noticia de una forma intencionalmente confusa para favorecer que el espectador se distraiga al escucharla. En resumen, cada vez que hoy vea a una periodista vestida de luto en los informativos públicos sepa que le está diciendo "ahora usted está siendo manipulado".

Según cuentan estas profesionales, ya no pueden más. El Partido Popular lleva siete meses bloqueando la puesta en marcha de la ley de reforma de RTVE, la única ley de la legislatura aprobada con el consenso de toda la oposición. Y las mil formas diarias mediante las que las noticias se tergiversan en su redacción, en su montaje, en su temporización, siempre a favor del Gobierno, les han llevado a iniciar un movimiento bajo los hashtags de #asísemanipula y #RTVEdetodos, para que todos los españoles podamos entrar en Twitter y encontrarnos con un abrumador listado de casos en los que un periodista no ha podido realizar su trabajo con la fidelidad y la objetividad que sería exigible a los informativos que la ciudadanía paga con su propio dinero para mantenerse escrupulosamente informada de sus asuntos políticos.

Hoy es un viernes negro en la televisión pública. Se recuerda el fallecimiento de la pluralidad y la imparcialidad en las noticias que nos contarán durante el día. Y la única esquela que el Gobierno no va a poder impedir que veamos es el color de la ropa de las periodistas de luto.

www.antoniorico.es