Madrid

Diagnósticos impensables para casos imposibles, suficiencia, falta de tacto, perspicacia, mal genio y comentarios ingeniosos podrían ser rasgos de un básico perfil de «House». Una serie que ha dado la campanada en Cuatro y que hoy vuelve con una tercera temporada que apenas ha dado dos semanas de respiro a unos ávidos fans tras el final de la segunda. Esta nueva temporada echa a andar, nunca mejor dicho, con la posible recuperación de la cojera del médico, varias novedades y más complicados y extraños casos clínicos.

En el último capítulo el marido de una de sus pacientes dispara al socarrón médico. Además de debatirse entre la vida y la muerte, el imprevisible doctor no deja de sufrir extrañas alucinaciones, debido a la quetamina con la que la doctora Cuddy intenta terminar con el dolor y la cojera de House. De esta forma, echa a andar una tercera temporada en la que Gregory House se enfrentara a nuevos problemas: la posible recuperación de su cojera, su adicción a la vicodina, la aparición de un inesperado paciente dispuesto a hacerle la vida imposible, el enfrentamiento con su amigo Wilson o el cambio de actitud hacia algunos de sus pacientes, entre otras sorpresas.