No es oro todo lo que reluce. Ni mucho menos. Hacienda también gana con el bote de Pasapalabra que ayer consiguió Fran González. El asturiano, vecino de Colloto, tendrá que pagar gran cantidad de su premio en impuestos. De hecho la gran pregunta ayer durante la emisión del programa es cuánto dinero de ese casi millón y medio de euros del premio se iría finalmente al bolsillo de González. Y la respuesta es que Hacienda se lleva casi la mitad de ese premio. En total un 48 por ciento. Casi como si alguien del ministerio hubiera estado participando en el rosco durante 60 programas. En total hizo 740.000 euros de caja.

Lo cierto es que la vieja polémica sobre lo que se lleva Hacienda de los concursos de televisión no es algo nuevo. Y es que muchos concursantes, sobre todo en los últimos meses, han establecido lo de participar en estos formatos casi como un modo de vida o como si de un trabajo a tiempo completo se tratara. Y por eso no les gusta que Hacienda se lleve un pico tan grande. En este enlace puedes leer la respuesta que dieron hace un tiempo Los Lobos de Boom cuando se les preguntó por este extremo.

Fran González llevaba meses “trabajando” en Pasapalabra. Tanto que todo el mundo sabía que antes o después iba a conseguir su gran reto: el rosco con el que triunfar y llevarse a casa más de millón y medio de euros. Y el gran día fue ayer. Fran consiguió su gran gesta ante más de cuatro millones de espectadores. Fue el minuto de oro del día. Pero no es algo nuevo.

Fran ha tenido siempre mucho respaldo de la audiencia. De hecho eso ha sido lo que le ha permitido (junto con sus conocimientos), ganar parte del premio a González. Pero ¿a qué va a dedicar tanto dinero? El propio asturiano lo confesó hace tiempo. Quiere conseguir dinero para su familia (sobre todo para que su sobrino estudie) y pretende, además, hacerse algún que otro viaje y trabajar en un nuevo laboratorio. No en vano a pesar de que se le dan muy bien las letras González es un hombre de ciencias licenciado en Biología. Ahora, después de todo, el asturiano tendrá que volver a la normalidad. Una normalidad que, eso sí, no va a ser sencilla con toda esa cantidad de dinero que tiene ahora bajo su brazo gracias a sus conocimientos y a su forma de jugar a Pasapalabra.