Ribadesella, Bárbara MORÁN

Un soleado día de febrero del año pasado un grupo de riosellanos disfrutaba de una excursión por su concejo. Entre ellos iban varias mujeres para las que aquel paseo marcó un antes y un después en sus vidas y que, además, revolucionó la historia de los bolos.

Una parada prevista en aquel paseo por el concejo era la bolera de Moru, situada en el pueblo de Nocéu. Es un lugar emblemático para los jugadores locales de bolos, entre los que destaca José Manuel Rosete, alcalde de Nocéu y un amante de este deporte, que fue el encargado de explicar a los excursionistas los secretos, alegrías y actualidad de los bolos en Asturias. Las palabras de Rosete despertaron un gran entusiasmo entre varias mujeres asistentes a aquella excursión. Tanto que a los días era el propio Rosete el que comenzaba a entrenar a Las Riosellanas. Así nacía la primera peña de bolos femenina federada que ha dado la historia en Asturias.

Si hay algo que caracteriza a Las Riosellanas es su empeño e ilusión desde el primer día por aprender a tirar la bola, a contar los tantos y, sobre todo, por divertirse y compartir el juego de los bolos con otras mujeres vecinas, con las que no tenían antes los lazos de amistad que se han fraguado desde que juegan juntas.

María del Mar Rodrigo, Estela Rosete, Patricia Toyos, Isabel Casado, Emilia Martín, Ana María Cortés, Enedina García, Ana María Pendás y Joaquina González son las nueve jugadoras de Las Riosellanas. Desde su inicio, hace un año, su carrera deportiva ha sido imparable y admirable. Los grandes amantes y defensores de este deporte genuinamente asturiano no dudan en confesar que Las Riosellanas han sido el revulsivo y la vitamina para un deporte que hace unos años languidecía.

Tal ha sido su trayectoria en tan poco tiempo tirando la bola que en unos meses ya tienen a su espalda varias competiciones de exhibición en Asturias y Cantabria. Se han proclamado vencedoras del primer campeonato oficioso de Asturias de cuatreada para mujeres y han hecho méritos para ser galardonadas como equipo revelación por el Ayuntamiento de Ribadesella en la gala del deporte 2009. Además, hace unos días, se hacía pública el acta del jurado de los premios «Picu Peñamellera», en los que un galardón ha recaído en esta revolucionaria peña femenina. Lo tienen claro: «Empezamos a involucrarnos cada día un poco más en la historia de los bolos, nos encanta jugar y es el deporte que nos ha unido a todas. Ahora forma parte de nuestra historia», destacan las jugadoras.

La Federación Asturiana de Bolos, presidida por Desiderio Díaz, ha mostrado su apoyo a la peña femenina a los pocos meses de conocer su existencia. Todos las han arropado. Otras peñas de bolos no dudaron en jugar amistosos con Las Riosellanas para contribuir a ahondar en su afición por la cuatreada. Uno de estos encuentros fue la partida disputada entre este equipo de féminas contra la Peña Bolística Moru (Ribadesella).

Las intrépidas jugadoras confesaban ayer sentirse muy «orgullosas» por haberse hecho acreedores al premio «Picu Peñamellera» en su decimosexta edición, un galardón que las jugadoras recibirán el próximo 13 de agosto y que ha supuesto un revulsivo para su actividad bolística, según aseguran, y que les da aliento para seguir mejorando y creciendo en el deporte, pero, sobre todo, para trabajar por que más mujeres se animen a probar suerte en las boleras de Asturias, tradicionalmente frecuentadas por los hombres casi en exclusiva. Y, por supuesto, no se olvidan de reclamar a los niños y jóvenes que se incorporen a esta tradición tan asturiana.

Con estas metas de promoción de los bolos Las Riosellanas han visitado varios colegios de la región para mostrar a los pequeños el deporte y extender su afición por Asturias. «Trabajamos para conseguir estos objetivos y mientras van llegando nuestra peña seguirá feliz, disfrutando de una tarde de amistad compartida con otra peña, recorriendo diversos rincones de Asturias, conociendo a sus gentes, disfrutando de su gastronomía y ganando o perdiendo, según caiga la bola», confiesan.