Gijón, Susana F. SERRÁN

Un revólver calibre 38, un rosario y un puñado de calaveras. Lecter Bukosky llega a la «Semana negra» dispuesto a enfrentarse con la muerte. Este oscuro personaje, inspirado en el Robert Mitchum de «La noche del cazador» (Charles Laughton, 1955), pone vida en directo a un género musical pocas veces visto en tierras asturianas: el «spoken word». Se trata de un recital sobre una base de rock and roll que, en este caso, bebe tanto de la lírica de Jaime Gil de Biedma, José Ángel Valente y los «novísimos»; como del gamberrismo de los Rolling Stones, Lou Reed o la Generación Beat.

La historia de Lecter Bukosky es la de un sicario que para encubrir sus crímenes se hace pasar por estrella del rock. Pero, que no cunda el pánico. Detrás de este asesino a sueldo se encuentra el avilesino Valentín Cañibano que, junto con el músico gijonés Marcos Álvarez, idearon la creación de este show. «A mi me gusta mucho escribir», comenta Cañibano, «así que nos inventamos al personaje de Bukosky, empezamos a jugar con él, y acabamos grabando el disco».

En el directo, el show se divide en dos partes. Primero se cuenta la historia del protagonista, que se publicará por escrito próximamente; y después, da comienzo el recital. Eso sí, «tenemos la norma no escrita de que Bukosky nunca puede cantar», comenta Cañibano.

Siete temas componen el repertorio del LP, «Políticamente incorrecto». Todas las canciones representan un homenaje a la muerte, y en ellas la poesía se funde con fuerza con los ritmos protagonistas emanados de una guitarra acústica.

Esta noche, Lecter Bukosky será una de las sorpresas del certamen, y podrá verse en la Carpa del Encuentro a las 22.30h.