La cuatro modelos de Mónica Solar se mojan con el periódico. Concretamente, con LA NUEVA ESPAÑA. Tal cual. Todo tiene su explicación: Solar es una artista de 24 años de Viodo (Gozón), que ha realizado una obra escénica, una «performance», en la playa de su pueblo como motivo de un trabajo artístico que tenía pendiente. Y una de las peculiaridades de esta obra es que las modelos van vestidas únicamente con faldas hechas con hojas de LA NUEVA ESPAÑA.

Todo empezó porque la gozoniega tenían que realizar un trabajo sobre la danza, pero como no tenía conocimientos suficientes sobre este arte, ni poseía medios económicos para contratar a bailarinas, pensó en el mar como protagonista «del movimiento danzante». A la hora de elegir el escenario, se le ocurrió la playa de Viodo, un paraje que destaca por el color rojizo de la arena y del agua a causa de la presencia de minerales compuestos por hierro, de una mina cercana.

Uno de los sellos de identidad de Solar son las fotografías, en las que predominan los tonos grises, que le recuerdan, de esta manera, los numerosos días nublados de su tierra asturiana. Como escenario, se decantó por la playa rojiza de Viodo, que contrastó con las blancas espaldas desnudas y el papel de periódico utilizado para crear las faldas de las modelos.

La artista llevaba tiempo con ganas de emplear periódicos en sus obras y cree que la manera en la que se deshace el papel en el agua es fascinante: «Primero la tinta se emborrona, más tarde desaparece dejando el soporte de papel grisáceo y, finalmente, el papel se va deshaciendo con el continuo contacto con el agua. Es una sensación de limpieza». Además, todos los ejemplares utilizados son del diario de LA NUEVA ESPAÑA. «Llevo leyendo este periódico desde que era pequeña. Me fui a estudiar fuera y lo único que leía era la edición digital de LNE. Así que en mi casa, cuando me puse a recopilar, sólo encontré este periódico», explica Solar.

Las prendas que eligió para que se desvaneciesen con el movimiento de las olas fueron las faldas: «Siempre trabajo con modelos femeninas, no por ninguna reivindicación de la mujer, sino porque me engancha la sensibilidad que transmiten las mujeres. Y la falda es una prenda muy representativa de este género».

El propósito de la «performance» es crear danza con el movimiento de las olas del mar bajo las faldas de las modelos.

«Pese a que la fotografía es el registro de la obra, el propio desarrollo de la acción es el corazón del trabajo», matiza Solar. «Este tipo de arte permite expresar sin palabras algo del interior que no puedes hacer con otra modalidad. Puedo trabajar con la fotografía, con las modelos femeninas. Es un arte escénico que conecta totalmente con mi personalidad», sentencia.

Este trabajo realizado por la asturiana es, por el momento, la pieza que cierra una serie de obras de cuadros y fotografías en la que se destaca el protagonismo de las espaldas desnudas. La diferencia de éste es el poder transmitir el movimiento con las olas de la playa.

A la hora de elegir las modelos se inclinó por chicas que estuviesen acostumbradas al mar. «Quería que el contacto con el agua no supusiera para ellas la sensación de que se mojan, sino que sintieran que el mar tiene movimientos de bailarín», relata la creadora.

La artista gozoniega alude a la conexión de su trabajo con la bailarina estadounidense Isadora Duncan: «Ella fue mi inspiración. De pequeña no se iba a jugar con el resto de niños, sino que prefería ir a bailar junto al mar».

Mónica González Solar

Asturiana nacida en Viodo (Gozón). Se licenció en Bellas Artes por la Universidad de Salamanca, pese a que siempre tuvo una gran inclinación por la moda. Ha logrado, con gran dedicación, que el vestido sea el soporte artístico que utiliza, dice, «para transmitir sentimientos». Es ganadora del premio «Jóvenes Creadores de Castilla y León» 2012.